Hermosillo, Son. Dos criminales operadores de una organización delictiva fueron asesinados a balazos en un centro nocturno de Hermosillo; el violento ataque armado cobró la vida de otro masculino aun no identificado, mientras que dos personas resultaron heridas, creando un escenario caótico frente a decenas de jóvenes presentes en el lugar.
El asalto armado ocurrió la madrugada de este domingo en el centro nocturno Jakarta Clublife, donde cada fin de semana cientos de jóvenes acuden a divertirse. Sitio que al momento es resguardado por Servicios Periciales y Agentes Ministeriales que investigan y entrevistan a empleados del antro para esclarecer las circunstancias del ataque. Incluso señalaron que se analizará si hubo encubrimiento o auxilio a los agresores.
En un breve informe, la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora (FGJES), identificó a los fallecidos como Luis Antonio “N” y Felizardo Armando “N”, quienes presuntamente operaban para una organización criminal en la zona rural oriente de Hermosillo. Ambos eran responsables de las operaciones en Carbó, Estación Pesquiera, Ures y Rayón.
“Entre los fallecidos, están identificados quienes en vida se llamaban Luis Antonio “N” y Felizardo Armando “N”, presuntos integrantes de una organización criminal de Nogales, Sonora, para la cual fungían como responsables de sus operaciones en Carbó, Estación Pesquiera, Ures y Rayón”, comunicó la FGJE.
Entre los heridos se encuentra Kevin Alejandro “N”, cuyo padre fue recientemente señalado como miembro de la misma organización criminal según la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del departamento del Tesoro de los Estados Unidos. La Fiscalía Estatal, informó que se dará vista a la Fiscalía General de la República para los procedimientos legales correspondientes.
La escena del crimen está bajo resguardo, con el personal de Servicios Periciales procesando la evidencia con el apoyo de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC). Las autoridades administrativas también señalaron que intervendrán para determinar si el establecimiento cumple con los requisitos legales para su funcionamiento.