Ciudad de México. Durante los últimos años Aryna Sabalenka ha sido un claro ejemplo de resiliencia y espíritu de superación.
La pérdida de su padre en noviembre de 2019 significó para ella un inesperado golpe que cimbró su estabilidad, aunque nunca perdió de vista la meta que se trazó junto con su progenitor: convertirse en la número uno y levantar dos títulos de Grand Slam.
“Fue inesperada su pérdida porque era joven, tenía 43 años y muchos planes”, recordó la tenista bielorrusa que ayer, se convirtió en bicampeona del Abierto de Australia.
Una tarde, mientras caminaban cerca de una pista de hockey, Aryna y su padre se propusieron llegar a la cima del ranking y ganar un par de grandes para los 25 años. La jugadora inició entonces un camino espinoso con triunfos y caídas que finalmente desembocaron en la conquista de esa inmensa meta. Sabalenka ahora presume catorce títulos WTA, dos de ellos en Australia y el número uno durante la temporada pasada que sirven como mensaje a su padre: lo logró.
Aryna, de 25 años de edad, venció 6-3, 6-2 en 76 minutos a la china Zhen Qinwen, número 15 del mundo y finalista por primera vez en un Grand Slam.
La final fue interrumpida brevemente por manifestantes que expresaron su apoyo al pueblo palestino. Con el marcador 6-3, 2-0 para Sabalenka en el tercer game de la segunda manga, dos manifestantes desplegaron una bandera palestina y corearon “¡Gaza libre!” antes de que los agentes de seguridad los escoltaran fuera de la arena.
Se trató la tercera protesta este año en el torneo.
“El año pasado sentí más emoción, y esta vez es más alivio por la presión que he sentido durante estas dos semanas”, dijo tras recibir el premio de manos de Evone Goolagong, la aborigen australiana que este año festeja el aniversario 50 del primero de los cuatro títulos que logró en Melbourne.
La flamante monarca enlazó dos títulos en fila emulando a su compatriota Victoria Azarenka quien levantó el trofeo en 2012 y 2013. Su camino ha sido casi perfecto pues no cedió un solo set y apenas tuvo un poco de resistencia al enfrentar a Cori Gauff en las semifinales.
“Hoy no fue mi día”, dijo Zheng. “Pero he disfrutado mucho estos días”, agregó la tenista asiática, que mañana ascenderá al séptimo puesto del listado. Su actitud, su juventud y la proyección demostrada invitan a pensar en una evolución importante.
“Has hecho un torneo fantástico, estoy segura de que jugarás más finales de Grand Slam”, le dedicó la campeona, que en las jornadas previas abatió cronológicamente a Ella Seidel, Brenda Fruhvirtova, Lesia Tsurenko, Amanda Anisimova, Barbora Krejcikova y Gauff.
Sabalenka ingresó en el selecto grupo de campeonas que se coronaron sin conceder una sola manga en Melbourne en este nuevo siglo; 14 a su favor y ninguno en manos contrarias. Se une así a los nombres de Lindsay Davenport (2000), Maria Sharapova (2008), Serena Williams (2017) y Ashleigh Barty (2022).