Sobre las gradas del antiguo estadio Nou Camp, aficionados del León mostraron gigantescas pancartas que remitían al club legendario de los Cinco Copas. Para un equipo que atravesó momentos dramáticos en la Segunda División, su relación con la historia ha sido única. Ninguno de sus rivales en México pudo reunir en un mismo sitio a los tres jugadores mexicanos con más participaciones en Mundiales de la FIFA: Antonio La Tota Carbajal, Rafael Márquez y ahora Andrés Guardado, quien fue presentado en una ceremonia multitudinaria como flamante refuerzo.
Cuando el común de los profesionales se resigna al final de su carrera, basta mirar a jugadores como Guardado para saber que quieren dejar un legado, afirma el experimentado Daniel Guzmán, entrenador que debutó en el Atlas al centrocampista jalisciense en 2005. A sus 37 años y con 17 temporadas en Europa –siete de ellas en el Betis, donde era el capitán–, el llamado Principito contempló el retiro al lado de su familia, pero prefirió volver porque este club es histórico y me hizo sentir importante. Mi papá jugó aquí y así se cierra un ciclo
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En sus primeros años en el fut-bol profesional, Guardado era tan fino que transmitía la impresión de no contactar sus pasos con el césped. Se deslizaba con equilibrio de bailarín y una velocidad que invitaba a la admiración. Es probable que el tiempo opere en su contra, al menos en la percepción de algunos aficionados que dejaron de ver sus remates kilométricos con la pierna zurda. Pero hay otros mucho más optimistas como Márquez, con quien jugó cuatro de sus cinco Mundiales.
Nuestras historias están conectadas
, describió el zurdo horas antes de su despedida en casa del Betis. “Desde que iba al estadio a verlo jugar en el Atlas, quería ser como él. Antes de venir me dejó un recado: ‘Recuerda que yo fui bicampeón (con el León)’, me dijo. Y es cierto, pero no todos nacemos con esa varita”. Márquez ganó dos campeonatos de Liga en su regreso a México con 34 años. Durante ese tiempo fue capitán, contrarrestó la falta de velocidad con sus afilados colmillos de experiencia y terminó por volver a Europa para cerrar su carrera en el Hellas Verona.
El León, que mucho antes tuvo también a La Tota Carbajal en el arco, preparó un gran espectáculo de bienvenida para recibir al último integrante de los Cinco Copas, cuyo vínculo finalizará en el verano de 2025, cuando cumpla 39. Guardado viene con buen ritmo, porque está jugando. No tiene ninguna lesión
, resalta Guzmán sobre el riesgo que implica adaptarse a un nuevo futbol. Todo proceso lleva su tiempo, pero esto es como traer una joya a su propio origen. Es un líder que puede inspirar la carrera de los más jóvenes
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Fila de seguidores
Cientos de seguidores esmeraldas hicieron fila por varias horas para ingresar al inmueble. Una vez allí, ondearon banderas al ritmo de mariachi y entonaron la célebre canción de José Alfredo Jiménez: No vale nada la vidaaa/ la vida no vale naaada/ comienza siempre llorando/ y así llorando se acabaaa
. La gran expectativa por el regreso del Principito produjo también una alta demanda sobre su nueva camiseta con el dorsal 17, el mismo que utilizó en sus inicios con el Atlas.
Ilusión por el Chicharito
En Guadalajara, las negociaciones entre Chivas y Javier Hernández llegaron a su última etapa con sensaciones favorables. De acuerdo con diferentes medios locales, la directiva rojiblanca prepara el anuncio oficial del regreso de Chicharito a sus filas y una presentación colorida el sábado en el estadio Akron, con las puertas abiertas a los aficionados y mensajes grabados en vi-deo de estrellas internacionales.
Ya desde la primera fecha de la Liga, la camiseta 14 con el nombre del máximo goleador de la selección mexicana se vendía al por mayor en los puestos de venta del equipo. Su último partido en el futbol mexicano fue en julio de 2010, cuando en una operación silenciosa, pero efectiva, el entonces dueño del Rebaño, Jorge Vergara, logró venderlo al Manchester United inglés.