Bogotá. El féretro de Piedad Córdoba, una reconocida ex senadora de la izquierda liberal en Colombia, llegó el lunes al Congreso para recibir un homenaje póstumo antes del sepelio en su natal Medellín.
Córdoba falleció el sábado en Medellín a los 68 años. Al ser recibida en el hospital sin signos vitales, los médicos realizaron maniobras de reanimación cardiopulmonar sin éxito.
Custodiado por policías, el féretro ingresó al Salón de la Constitución, donde fue recibido por políticos de izquierda y allegados con rosas blancas y amarillas.
“Hasta siempre compañera”, rezaba uno de los ramos con flores blancas enviado por Andrés Camacho, ministro de Minas y Energía.
De raíces afrocolombianas que exaltaba con turbantes en su cabeza, Córdoba se hizo célebre por su estrecha amistad con el presidente venezolano Hugo Chávez y sus gestiones para liberar a los secuestrados en poder de la extinta guerrilla Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Tuvo una fructífera carrera política que pasó todas las etapas de los cargos de elección popular siendo desde edil hasta senadora. Fue elegida cinco veces al Congreso, desde 1998 hasta 2022, siempre en defensa de las minorías étnicas, de género y las salidas negociadas al conflicto interno.
Su intermediación con los armados le valió críticas de sus detractores que la señalaban de presuntos vínculos con las FARC, los cuales siempre negó.
En 2010 el entonces procurador conservador Alejandro Ordóñez la destituyó e inhabilitó para ejercer cargos públicos por supuestamente intentar favorecer al grupo subversivo basado en documentos que incautó el ejército durante una operación contra la guerrilla. Seis años después, el Consejo de Estado anuló la decisión al encontrar que eran ilegales las pruebas recabadas en la operación.
En sus últimos días de vida Córdoba lidió con la captura y extradición de su hermano Álvaro Córdoba a Estados Unidos por cargos federales relacionados con narcóticos. El 2 de enero se declaró culpable y su sentencia fue programada para abril.