Washington. El crecimiento económico mundial seguirá siendo “resistente” este año después de un 2023 más sólido de lo esperado, dijo el jueves el Fondo Monetario Internacional (FMI), si bien advirtió que es necesario trabajar para impulsar las tasas de crecimiento global por encima de un anémico rango de 3 por ciento a corto plazo.
La portavoz del FMI, Julie Kozack, declaró en una rueda de prensa que la economía mundial parece encaminarse hacia un “aterrizaje suave”, con una inflación en retroceso y unos mercados laborales resistentes, pero que los países de renta baja aún podrían quedarse rezagados.
Se espera que el FMI publique una actualización de sus previsiones económicas este mes.
El Banco Mundial (BM) publicó el martes unas sombrías perspectivas para este año, según las cuales el crecimiento del producto interno bruto (PIB) mundial se ralentizará por tercer año consecutivo a 2.4 por ciento, lo que pondrá en peligro los objetivos de reducción de la pobreza.
Continuación de la resistencia
Por su parte, Kozack destacó que las funestas predicciones de recesión en muchas regiones que prevalecían hace un año no se materializaron en 2023.
“Así que hemos tenido una economía mundial relativamente resistente hasta ahora. Esperamos que esa resistencia continúe en 2024”, dijo Kozack, señalando que la inflación está bajando.
Pero las noticias “no son del todo buenas”, porque el crecimiento reciente y a corto plazo, en torno a 3 por ciento, es inferior a las tasas medias de crecimiento mundial anteriores a COVID, en torno a 3.8 por ciento.
“Así que tenemos trabajo por hacer para levantar el crecimiento mundial, especialmente a mediano plazo”, previno Kozack, añadiendo que la situación apunta a la necesidad de políticas y reformas sólidas que puedan elevar la productividad.
Países de renta baja, en riesgo
Al ser consultada sobre si la resistencia económica en 2024 se extendería más allá de Estados Unidos, Kozack señaló que existe una divergencia de fortunas entre países y regiones, con el riesgo de que los países de renta baja se queden aún más rezagados.
“Son los que más difícil lo están pasando para recuperarse de una serie de shocks, como la pandemia y las crisis de los precios de los alimentos y el petróleo”, indicó.
Finalmente comentó que la labor del FMI en 2024 se centrará especialmente en ayudar a sus miembros más vulnerables.