Ciudad de México. El proceso de desinflación en México y en Estados Unidos será complejo y lento durante el 2024, prevén analistas económicos durante el primer panel del año de la Bolsa Institucional de Valores (Biva): “Perspectivas económicas de 2024”, dirigido por María Ariza, directora general de la entidad bursátil.
Alejandra Marcos, directora de análisis y estrategia en Intercam Casa de Bolsa, sostuvo que la inflación en ambas economías enfrenta varios riesgos, en donde el repunte de los precios al consumidor en la recta final de 2023, confirma que el descenso del costo del crédito (tasas de interés) no va a ser tan pronto, ni tan rápido como estaban esperando los mercados porque hay muchas presiones sobre la inflación.
Tan sólo en México, dijo la especialista de Intercam, la inflación de servicios se encuentra arriba del 5.0 por ciento; las mercancías, si bien han bajado frente a un periodo particularmente volátil por el tipo de cambio, es probablemente que el camino desinflacionario se frene moderadamente, pues hay eventos geopolíticos que están en el radar que pueden hacer cambiar las cosas, como los problemas en el comercio marítimo. Además, este 2024 se tendrá un déficit fiscal enorme, que presionará la inflación.
Uno más, consideró Marcos, los costos laborales de las empresas en general se han incrementado un 25 por ciento, “si tomamos en cuenta las revisiones a la alza del salario mínimo y las revisiones contractuales pues entonces nos damos cuenta que las empresas realmente están enfrentándose a un complejo contexto de costos y frente a una economía que se va a mantener fuerte y sólida, al menos la primera mitad del año”.
Panorama incierto
Por su parte, Ricardo Aguilar, economista en jefe de Invex, sostiene que si la economía de Estados Unidos o de México no se enfría lo suficiente, la perspectiva de la baja de tasas de interés será demasiado optimista en los mercados financieros.
“La información oportuna este año será de suma importancia, en de suma relevancia observar la recomposición del crecimiento”, sostuvo Aguilar, ya que los desajustes de la pandemia han cambiado mucho las métricas establecidas para ciertos eventos.
En las más recientes minutas de la Reserva Federal (Fed) quedó claro que la tasa de interés de referencia podría aumentar nuevamente si la situación lo amerita.
Si bien hay consenso sobre el proceso desinflacionario que se registra en México, aún no hay un mensaje unánime entre los miembros de la Junta de Gobierno del Banco de México sobre cuándo sería adecuado iniciar un ciclo de baja en la tasa de referencia.
En tanto, Jorge Suárez Velez, managing director de Acia, afirmó que el impacto de las pandemia no ha terminado, por lo que es más difícil pronosticar en estos tiempos. Lo que sí prevé es que la segunda mitad de 2024 será muy complicada en México y en la principal economía del mundo y también principal socio comercial del país.