Ciudad de México. El Poder Judicial de la Ciudad de México representa la garantía de que un tribunal libre y autónomo que escucha, protege y sirve a quienes necesitan reivindicar lo que les corresponde sin importar razas, credos, ideologías o profesiones, afirmó su presidente Rafael Guerra Álvarez.
Durante su mensaje a trabajadores con motivo del inicio de labores este año destacó que el PJCDMX es una institución de puertas abiertas, cercano al pueblo, leal a los principios que lo fundan y consciente de su responsabilidad e importancia.
Se trata, argumentó, de una institución dotada de la fuerza del Estado para unir, construir y defender a mujeres y hombres, pero también a todas las tendencias y conciencias, pues toca la vida de la gente y cambia la realidad.
“Nos hemos propuesto celebrar nuestro credo en común para mostrarle a toda la nación lo que implica y demanda la impartición de justicia: todo el estudio, toda la empatía, la colaboración, el sacrificio, profesionalismo y excelencia dentro de los muros de este alto tribunal”, puntualizó.
El impartir justicia, afirmó, es una labor que convoca el esfuerzo de individuos y equipos, e implica conocer los hechos, analizar la ley, evaluar pruebas, testimonios y peritos, e incluir perspectivas como el género, la lengua, la cultura.
Mencionó que, el PJCDMX “saber escuchar, ver y tener la mente y el corazón abiertos para tomar decisiones en favor del bien común, por lo que atesora su identidad como vanguardia en la lucha por la justicia y la paz, y en la esperanza de que las futuras generaciones puedan contar con la defensa y ejercicio de sus derechos”.