Ciudad de México. Alrededor de las 9:30 horas, la fila para tramitar citas de laboratorio en la clínica 162 del IMSS, ubicada en Tláhuac empezó a crecer porque la ventanilla estaba cerrada. “Hora de comida. Tome asiento, favor de esperar”, indicaba un letrero que fue colocado una hora después de la toma de muestras.

“Aquí siempre hacen pausas porque dicen que no hay personal y menos ahorita que algunos están de vacaciones”, comentó la señora Hilda, quien era la primera en la fila y alcanzó a ver que el encargado de dicha ventanilla ponía el letrero y ya no pudo agendarla antes de esa pausa.

De acuerdo con derechohabientes y personal de esta clínica del Seguro Social, los empleados suelen tener 30 minutos para un lapso de comida. De modo que no les resulta extraño ni les sorprende que deban esperar si ven un letrero como el que estaba en la ventanilla del laboratorio clínico.

En ese lapso, la fila fue creciendo poco a poco y cuando regresó el encargado, ya había alrededor de 15 personas, entre las que algunos sí comentaron que es muy molesto que se den espacio cuando en una clínica los horarios son corridos, pero otros comentaron que así es en gobierno.

“Así es con la burocracia, esto nunca va a cambiar. El personal es el mismo esté el gobierno que esté. Ellos se toman su tiempo, aunque a uno le cancelen la cita por cinco minutos que llegues tarde a la consulta”, reprochó la señora Silvia de 65 años, quien cada mes acude a cita médica.

Una vez que regresó a sus labores, el encargado de la ventanilla atendió a los pacientes, aunque uno de ellos salió más molesto, porque una orden médica era para Rayos X, pero el aparato está descompuesto y le pidieron su número telefónico para avisarle cuando ya sirva y puedan darle la cita para ese estudio clínico.

“Cada que vengo, trato de tomar las cosas con calma, porque siempre me hacen pasar corajes. Si no es aquí para laboratorio, es en la farmacia o en la coordinación, donde ponen los sellos para hacer cualquier trámite de citas. Me tengo que armar de paciencia, no hay de otra”, comentó resignado antes de salir de la clínica.