Este jueves se prevé que un juez del Poder Judicial de la Federación resuelva un amparo de Monsanto en contra del decreto presidencial que establece la sustitución del glifosato a partir del próximo primero de abril, sin reconocer a la Colectividad del maíz -que desde 2013 ganó la suspensión de la siembra de maíz transgénico- como tercera parte interesada, sostuvo Mercedes López de la Campaña nacional sin maíz no hay país.
Recordó que el 15 de noviembre el magistrado Ricardo Gallardo del Cuarto Tribunal Colegiado en materia administrativa del primer circuito iba a aprobar una resolución del juicio de amparo de Monsanto -el único de los 37 juicios contra el decreto que ha avanzado- en el que utilizó argumentos de Bayer Monsanto para defender el uso del glifosato.
En aquella ocasión, mencionó, al hacerse pública la intención se suspendió el trámite pero en la lista de magistrados se publicó que se presentará la resolución el jueves 4 de enero y esto ocurre sin que el juez haya reconocido a la colectividad como tercera parte interesada y antes de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) resuelva el recurso de revisión extraordinaria en el que los ciudadanos pidieron que se remita la resolución a ésta instancia.
Mercedes López dijo en entrevista que “tenemos el antecedente de que el juez Ricardo Gallardo y su secretario Erick Castillo en noviembre tenían una resolución favorable a los intereses de las transnacionales, aun sin haberla votado”.
Recordó que cuando en 2021 “como demanda colectiva, se obtuvo la resolución a favor en la SCJN y se mantuvo la medida precautoria de la prohibición de la siembra de maíz transgénico, la colectividad obtuvo el carácter de terceros en interés jurídico en el juicio sobre maíz. Pedimos en la demanda contra el decreto presidencial ser reconocidos como terceros interesados. El juzgado lo desechó con el argumento de que el maíz no era un tema central, aunque en el segundo decreto tiene un papel fundamental. Aun así no ha permitido que la colectividad se defienda”.
El proyecto de resolución que se echó abajo en noviembre determinaba amparar a Monsanto para que siguiera importando glifosato, “argumentando que no era peligroso para las personas y medio ambiente, si se tomaban en cuenta las especificaciones de los proveedores y que el uso indebido es el problema, por lo que, según el juez, no se debe restringir el uso de la sustancia. Ese proyecto de sentencia reproduce argumentos de Bayer Monsanto”.
El juez “se ostenta como experto en el tema, dice que el glifosato no es un peligro para el ser humano y el medio ambiente; descalifica el principio precautorio, que es un instrumento internacional para proteger la biodiversidad, y se apoya en estudios de empresas e investigaciones ligados a ellas. Señala que no hay evidencia de daños al glifosato, descalifica a la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer, dice que hay dudas de sus investigaciones acerca de que el químico sea cancerígeno”, agregó.
Indicó que ahora con un albazo quiere sacar la resolución, la SCJN responderá en unas dos semanas y el juez acelera la resolución, “esto es grave porque no se ha discutido, es una asonada de las transnacionales”.
Agregó que lo que “queremos es dar los argumentos, pero siguen sin escucharnos. Exigimos que nos escuchen como terceros interesados. En el panel de controversias sobre maíz transgénico se abrió la oprotunidad de que cinco organizaciones mexicanas opinen, pero aquí el cuarto tribunal colegiado no nos da el derecho a la palabra”.