Mapastepec. La Caravana “éxodo de la pobreza”- que cumple una semana de travesía por la costa de Chiapas- decidió descansar por segundo día consecutivo en el municipio de Mapastepec a la espera de una respuesta formal por parte del Instituto Nacional de Migración a su petición de papeles de tránsito para poder avanzar al centro y norte de México.
De los casi siete mil migrantes que salieron el día de Nochebuena de Tapachula, quedan 3 mil 286 según un censo realizado por el Centro de Dignificación Humana A.C. en el campamento instalado en un campo deportivo donde los migrantes pasan el día.
Luis García Villagrán, representante de la organización, pidió a la administración del Presidente Andrés Manuel López Obrador tener un acto de bondad por estas fechas navideñas y de Año Nuevo, y atienda la crisis migratoria en el marco de la ley.
Explicó que funcionarios del Instituto Nacional de Migración les han dicho que serán atendidos siempre que regresen a Tapachula, sin embargo, los integrantes de la Caravana han decidido que esa no es una opción.
“La condicionante de nosotros es que nos entreguen un documento procesado por donde ellos quieran que nos permita avanzar al paralelo 19 que es la Ciudad de México, de otra manera mañana o pasado mañana saldremos caminando muy temprano para buscar Oaxaca”, expresó
Insistió en que la ley señala que los migrantes pueden acceder a Formas Migratorias Múltiples, oficios de saldos, visas por razones u otros documentos con el que puedan estar legalmente en México.
“Hacemos un llamado al Presidente Andrés Manuel López Obrador, a don Francisco Garduño (Comisionado del INM) para que de corazón vean el lado humano de esta crisis humana” pidió el activista.
Paola Hernández Zúñiga, de Honduras, dice que está cansada con lesiones en los pies y quisiera poder abordar un autobús junto a su esposo y tres hijos con los que viaja para ya no caminar.
“Aquí esperando a ver qué dice el Presidente (AMLO), que nos ayude a nosotros porque todos andamos aquí necesitados por querer tener un buen trabajo, un buen bienestar para nuestros hijos”, contó la mujer sentada sobre una sábana tendida en el suelo donde duerme.
Recordó que decidió salir de su país por la violencia de las pandillas, que han matado a cuatro tíos. En Tapachula llevaban tres meses yendo a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados pero sólo les daban largas, por lo que optaron en sumarse a la Caravana.
“(Queremos) llegar a Ciudad de México y conseguir un trabajo y trabajar duro”, concluyó.