Ciudad de México. Organizaciones campesinas y defensoras del maíz tradicional pidieron que la Secretaría de Economía (SE) contrademande a Estados Unidos en términos del Tratado Comercial de América del Norte (T-MEC) por las exportaciones de maíz genéticamente modificado, pues México carece de la garantía de inocuidad y de que ese producto no causa daño a la salud.
Las empresas de biotecnología son las que deben probar la seguridad del alimento a partir de los hábitos de consumo y las prácticas agrícolas del país, señalaron Demanda Colectiva Maíz, Campaña Nacional Sin Maíz No Hay País, así como la Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras, en sendas cartas a la SE.
Estados Unidos pidió en agosto pasado, bajo las reglas del T-MEC, la formación de un panel de solución de disputas con México para impugnar el decreto que el gobierno mexicano emitió en febrero de este año, que prohíbe el uso de maíz transgénico para alimentación humana.
Tras décadas de investigaciones, legislaciones y litigios, es posible asegurar que la academia, el gobierno de Estados Unidos o la industria de biotecnología no han realizado un solo estudio científico, análisis o evaluación de riesgos que mida efectivamente los impactos y efectos sanitarios que causarían los maíces modificados genéticamente sobre la ingesta de la población mexicana
, señalaron las organizaciones mexicanas.
Empresas, con la carga de la prueba
La carga de la prueba sobre la inocuidad del maíz que Estados Unidos exporta a México, y de sus posibles derivados agrícolas, es responsabilidad de las empresas de biotecnología y de las autoridades estadunidenses que cuentan con toda la información de este maíz que se produce en su territorio, agregaron las agrupaciones.
Indicaron también que, para que los resultados de los análisis de riesgo sean efectivos, las autoridades sanitarias estadunidenses deben garantizar un manejo diferenciado de los riesgos asociados a cada evento, o deberán aceptar que las medidas de manejo serán aplicadas a toda la exportación de este alimento.
Recordaron que las productoras estadunidenses pidieron apoyo a su gobierno, que a su vez abrió la controversia contra México.
Ahora, en el país los productores de maíz pedimos a nuestro gobierno que contrademande a Estados Unidos, porque la contraparte ha incumplido con los beneficios que prevé el T-MEC, es decir, la garantía de inocuidad y no daño
.
También pidieron que México exija una indemnización por el incumplimiento de los beneficios que están contemplados enel T-MEC.