Con el propósito de poder efectuar obras de infraestructura pública relacionadas con el Proyecto del Tren Maya, el gobierno federal declaró que 113 inmuebles de propiedad privada serán de utilidad pública.
Estos terrenos suman en una superficie de 456 mil 365 metros cuadrados dentro de los municipios de Palenque en Chiapas; Emiliano Zapata y Balancán en Tabasco; Candelaria, Escárcega, Champotón, Campeche, Hecelchakán y Tenabo en Campeche; Kanasín e Izamal en Yucatán, y Tulum, Solidaridad y Othón P. Blanco en Quintana Roo.
Con esta declaratoria, publicada en el Diario Oficial de la Federación, los 113 inmuebles podrán ser ocupados de manera inmediata conforme a la Ley de Expropiación.
Aunque “los interesados tendrán un plazo de quince días hábiles a partir de la notificación o de la segunda publicación en el Diario Oficial de la Federación de la presente Declaratoria, para manifestar ante la Unidad de Asuntos Jurídicos de la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano, lo que a su derecho e interés convenga y presenten las pruebas que estimen pertinentes”.
El gobierno federal recordó en esta declaratoria que el Tren Maya “funcionará como corredor humanitario por medio del cual se entregarán apoyos alimentarios y médicos para las comunidades indígenas y pueblos marginados del sureste mexicano”.
Por ello, justificó que con esta utilidad pública de los inmuebles se contribuye a las obras de un transporte que tendrá un flujo constante, y solo por su conducto, se podrá llegar a dichos poblados “de manera pronta y eficaz”.
Señaló que “la construcción del Tren Maya es el compromiso más relevante de infraestructura para impulsar el desarrollo socioeconómico y turístico de la historia del sureste del país y fortalecer la integración de cadenas productivas en la península de Yucatán, así como para elevar la calidad de los servicios turísticos y fomentar la capacitación y profesionalización del capital humano que forma parte de esta industria”.