Ciudad de México. La fuerza física, el semblante combativo y el éxito deportivo no son exclusivos de un género. La dulzura en las facciones de Alexa Grasso puede provocar una lectura equivocada respecto de su potencial como monarca en las artes marciales mixtas. No obstante, sus logros en el octágono han sido tales que, junto con la ex campeona de boxeo Irma Güerita Sánchez y la nadadora Liliana Ibáñez, rompieron con el patrón de los roles de género al ser protagonistas de los primeros murales de mujeres deportistas en México.
Estas imágenes pueden cambiar muchos estereotipos sobre cómo son la masculinidad y la feminidad en los deportes. Se vuelven una inspiración para que más niñas se acerquen a las diver-sas disciplinas. Mientras más mujeres sean vistas (como casos de éxito) ayudará a un desarrollo más sano de las nuevas generaciones
, dijo Eloísa Rivera, académica del Centro de Investigaciones de Estudios de Género (CIEG).
Los murales de atletas varones en barrios marginales o de los lugares donde surgieron suelen ser más comunes, pues los representa como héroes al recordar que lograron un ascenso de estatus social con proezas en el deporte. No obstante, aún son pocas las representaciones artísticas que muestran esos mismos casos de éxito e inspiración de las mujeres. De ahí la relevancia de reconocer de manera pública las hazañas de estas atletas.
Ferocidad y ternura
¿Cuántos héroes deportivos ha dado México en disciplinas como el boxeo?, el cual es un atracti-vo popular y más accesibles que otros deportes al practicarse incluso en gimnasios de barrio. Puede haber muchas mujeres dedicadas a esta disciplina, pero si no hay a quién admirar es complicado el desarrollo
, subrayó Rivera.
Grasso ganó en marzo el título mundial mosca de la UFC ante Valentina Shevchenko, de Kirguistán, y lo retuvo en agosto contra la misma rival. Aún con las marcas de golpes en los pómulos, la mirada de la mexicana no dejaban de transmitir una especie de ternura. Sólo cuando enfrentó a su contrincante permitió a los demás captar el halo de ferocidad que emanaba de ella. Ahí estaba su esencia real, la de una peleadora.
No necesariamente quienes participan y triunfan en el deporte de contacto deben tener una imagen estereotipada de ruda o con cierta complexión
, señaló Rivera.
Los mismos rasgos de Alexa, que navegan entre la delicadeza y la fortaleza, han sido trazados con tinta en un mural en Zapopan, Jalisco, por las manos de la artista local Berenice Martínez.
En un fondo negro, con letras doradas y una bandera mexicana a espaldas, la imagen de Grasso destaca como una mujer victoriosa en un mural que admiran miles de transeúntes afuera de la estación Zapopan del Metro de Guadalajara.
Representa el triunfo y lucha que ha tenido Grasso para ser la primera campeona mundial mexicana de la UFC. No cualquiera ha hecho lo que ella logró, ¡es increíble! Por eso tratamos de inspirar a los demás con este trabajo
, detalló.
Con una paleta de colores que pasan por el morado, azul y dorado, la imagen de la Güerita Sánchez fue plasmada por la artista Diana Barragán. La ex monarca en la división mosca de la Asociación Mundial de Boxeo se muestra con una mirada retadora y con la guar-da en alto con ambos guantes que cu-bren parte de su rostro, el cual está rodeado por flores.
Me llamó la atención la fuerza de su mirada. Hay un juego de contraposición de lo femenino con la fuerza de ser boxeadora. Las flores son un símbolo de feminidad, fortaleza y resiliencia
, explicó Barragán.
Ambos murales fueron parte de una iniciativa del gobierno local a través del programa ZapopArt para recuperar espacios públicos por medio de obras de artistas mujeres.
El hecho de que sea de acceso público tiene otro impacto. Es encontrar en un trayecto cotidiano a estas mujeres que inspiran a nuevas generaciones
, apuntó Rivera.
Ibáñez, considerada la nadadora más rápida de México y quien busca competir por tercera ocasión en unos Olímpicos (París 2024), también es parte del selecto grupo de deportistas con una representación gráfica urbana. La imagen de la guanajuatense ha sido plasmada por un autor anónimo en el Deportivo Santa Cruz Meyehualco, en Iztapalapa, en una muestra de su ferocidad en las competencias acuáticas.
Rivera consideró que ahora lo importante será salir de lo local y que se reconozca con distintas narrativas las historias de otras mujeres que rompen estereotipos en las disciplinas deportivas.
Ha habido muchas boxeadoras, luchadoras y gimnastas. Existen esas historias y hay un interés por saber de ellas, es importante que los protagonistas ya no sean sólo masculinos.