Acapulco, Gro. El acervo de las 16 bibliotecas municipales de Acapulco fue declarado como pérdida total tras el paso del huracán Otis. Themis Mendoza Arizmendi, directora de la biblioteca pública municipal número 22 del zócalo de Acapulco, dijo que el recinto sufrió la pérdida de ventanales, puertas y muebles que resguardaban decenas de colecciones y enciclopedias.
Como la biblioteca estaba en reconstrucción, algunos libros se salvaron, pues estaban protegidos.
Mendoza Arizmendi detalló que el 8 y 9 de noviembre pasado participó en el Congreso Nacional de Bibliotecas Públicas, efectuado en Monterrey, Nuevo León.
"Rodrigo Borja, director general de Bibliotecas, expresó ante el pleno que la devastación del huracán Otis afectó a las 16 bibliotecas municipales de Acapulco, se comprometió a dotar de nuevas colecciones; todas las bibliotecas, grandes, medianas y pequeñas, se declararon con pérdida total".
Indicó que en estos momentos, bibliotecarios preparan un informe con fotografías de los daños en los recintos a su cargo.
Mendoza Arizmendi advirtió que además de los acervos, las bibliotecas sufrieron diferentes tipos de afectación, que les impide mantener bajo resguardo el material bibliográfico, por lo que deben ser reparadas o reconstruidas.
Esta semana, trabajadores de diferentes recintos comenzaron labores de evaluación y padrón de materiales dañados.
Sin embargo, enfatizaron que la mayoría de libros resultó dañada por el agua, por lo que en muchos casos los ejemplares fueron infectados por el hongo de la humedad, por lo que no es recomendable rescatar las ediciones, pues otras colecciones pueden ser dañadas.
Trabajadores de la biblioteca municipal número 360 Rosendo Pintos del parque Papagayo, reinaugurada hace alrededor de un año como parte de la remodelación del parque, explicaron que fue de las más dañadas, pues se encuentra a nivel del mar y todas sus ventanas fueron destruidas por el viento, al igual que su área verde, donde los árboles fueron derribados.
En su exterior lucen libros apilados, entre ellos, El Azteca de Gary Jennings y una biografía de Porfirio Díaz, con todas sus hojas mojadas.
El área infantil de la biblioteca del parque Papagayo fue de las más dañadas, pues el viento de 300 kilometros por hora derribó vidrios, anaqueles, mesas y sillas, al igual que ocurrió con el área de revistas y computadoras.
"El viento tiró las ventanas, destruyó los estantes y el agua terminó por dañar la colección de libros de Acapulco y Guerrero", lamentó Rosa Hernández Vega, de relaciones públicas de la biblioteca número 22 del zócalo, donde todavía hay vidrios esparcidos en el segundo piso del recinto.
Otras bibliotecas municipales afectadas fueron las de la Zanja y Simón Bolívar.
El mantenimiento de los libros tras el paso del huracán Otis es otro problema.
"Si usted colecciona libros tenga cuidado, no los acerque a otros", menciona la responsable de la librería Educal y el Fondo de Cultura Económica, que se encontraba en el Centro Cultural Acapulco, donde casi la totalidad de los libros fueron saqueados o dañados por el agua.
La misma advertencia hace Rosa Hernández ernández Vega, quien recalcó que los libros mojados, dañados por el huracán Otis, afectados por el hongo de la humedad, no se pueden mezclar con otros.