Ciudad de México. Los miembros de la junta de gobierno del Banco de México (BdeM) coincidieron en que la reducción de la inflación en los últimos meses ha sido “significativa”; no obstante, advirtieron que los riesgos sobre un posible aumento siguen latentes, además de que esperan un repunte temporal durante noviembre y diciembre de este año.
En las minutas correspondientes a su última reunión de política monetaria, en la que decidieron dejar la tasa de referencia en un nivel de 11.25 por ciento, los miembros del organismo autónomo destacaron que que la inflación general mantiene una tendencia descendente.
En el documento, algunos miembros (las minutas no identifican por nombre a quien hace el comentario) aseveraron que al avance en el proceso de desinflación ha contribuido la postura monetaria adoptada por el banco central.
En este sentido, la mayoría de la junta de gobierno comentó que las expectativas de inflación de mayor plazo se mantuvieron relativamente estables en niveles por encima de la meta. Mientras que uno agregó que los pronósticos de instituto central siguen anticipando que la inflación converja a la meta en el segundo trimestre de 2025.
Algunos explicaron que se prevé que la inflación no subyacente exhiba aumentos adicionales en los próximos meses. Uno indicó que, si bien se anticipa que la inflación muestre cierto repunte en algunos periodos, se espera que mantenga una trayectoria descendente; en tanto, todos manifestaron que, a pesar del avance en la desinflación, el panorama continúa implicando retos.
Al respecto coincidieron en que el balance de riesgos respecto de la trayectoria prevista para la inflación en el horizonte de pronóstico se mantiene sesgado al alza.