Washington y Nueva York. Incesantes protestas contra la guerra de Israel en Gaza y el apoyo incondicional de Washington a Tel Aviv –muchas de las cuales han sido encabezadas por jóvenes judíos estadunidenses sumados a musulmanes y otros– se han expresado a través de más de mil acciones en universidades, arrestos en actos de desobediencia civil en sedes empresariales y entidades políticas en demanda de un cese el fuego y la presentación de demandas legales acusando al gobierno de Joe Biden y otros líderes políticos de complicidad en genocidio y crímenes de guerra.
En medio del horror de este momento, un movimiento está surgiendo entre judíos estadunidenses jóvenes. Está basado sobre un principio simple: los judíos israelíes nunca estarán seguros si sus vecinos palestinos no los están
, escribió Peter Beinart, un editor especial de Jewish Currents y columnista del New York Times.
El jueves, cien personas con una manta gigantesca que decía Judíos por un cese al fuego
se congregaron en la plaza central de la Universidad de Yale para demandar que los administradores de una de las universidades más elitistas del país se pronunciaran a favor del cese de hostilidades.
Poco más al norte, en Cambridge, vecina de Boston, estudiantes judíos concluyeron una ocupación de 24 horas en el centro del campus de la Universidad de Harvard, con la misma demanda que sus contrapartes en Yale.
Algunos administradores universitarios intentan suprimir las protestas en sus instituciones. En la Universidad de Columbia, en Nueva York, 250 profesores se sumaron a cientos de estudiantes esta semana en rechazo a la decisión de esa casa de estudios de suspender las actividades de dos agrupaciones: Estudiantes por la Justicia en Palestina y Voces Judías por la Paz.
Otras movilizaciones de días recientes fueron realizadas por estudiantes en las universidades de la Ciudad de Nueva York, de Carolina del Norte y la de Minnesotta.
Gritos para sordos
Desde el 7 de octubre se fue generando una ola de protestas sobre el conflicto de Israel en Gaza, la gran mayoría de ellas a favor de un cese el fuego. De las mil 831 movilizaciones sobre esa guerra registradas en Estados Unidos del 7 de octubre al 15 de noviembre, mil 416 fueron en apoyo de un cese el fuego mientras sólo 415 se dedicaron a expresar apoyo a Israel, según el monitoreo del proyecto Crowd Counting Consortium.
Estas acciones no se limitan a sedes universitarias: el jueves, pacifistas bloquearon el tránsito en una de las grandes avenidas que enlazan Boston a Cambridge. En Chicago, Judíos por un cese el fuego
fueron arrestados al intentar bloquear la entrada al consulado de Israel. Esta misma semana, en Oakland, California, cerca de donde el presidente Joe Bien se reunía con otros líderes internacionales para la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), Boots Riley, director de cine y músico afroestadunidense, se sumó a cientos de judíos estadunidenses que fueron arrestados después de que bloquearon la entrada a un edificio del gobierno federal en demanda de que el gobierno de Biden se pronuncie por un cese al fuego.
Oficinas empresariales también ha sido un objetivo de las expresiones sobre la guerra, señalando la complicidad corporativa y el apoyo al gobierno de Israel.
Ayer, decenas de manifestantes judíos y palestino-estadunidenses se congregaron frente a las oficinas de la cadena Fox coreando: Fox News, Fox News, no te puedes esconder, tus mentiras encubren al genocidio
(rima en inglés).
Esta semana en Washington, cientos de voces de judíos y palestinos y sus aliados intentaron bloquear la sede nacional del Partido Demócrata cerca del Capitolio. Decenas de ellos con camisetas negras que decían cese el fuego ahora
y judíos por un cese el fuego
fueron reprimidos con gas lacrimógeno y empujados de manera violenta por las escalinatas de la entrada por la policía.
En otro frente, la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) y la organización Palestine Legal, presentaron una demanda penal federal en Florida contra el gobernador Ron DeSantis y funcionarios del Departamento de Educación de ese estado por violar la garantía constitucional de libertad de expresión porque ordenaron el retiro de apoyo de la organización Estudiantes por Justicia en Palestina en la Universidad de Florida.
También en el ámbito legal, esta semana el Centro por Derechos Constitucionales presentó una denuncia jurídica a nombre de palestinos americanos que viven en Estados Unidos y en Gaza, acusando formalmente al presidente Joe Biden, al secretario de Estado, Antony Blinken, y el secretario de Defensa, Lloyd Austin, de complicidad en genocidio por su apoyo de la guerra de Israel en Gaza.
Hemos perdido a tanta gente, pero hay muchos más que siguen vivos, y les debemos hacer todo lo posible para frenar este exterminio
, declaró Mohammad Herzallah, uno de los actores en el caso presentado esta semana, quien tiene familia en Gaza. He hecho todo lo que está a mi alcance: he participado en protestas, ocupaciones, escrito cartas a mis representantes, actos de desobediencia civil. Ahora le estoy pidiendo a los tribunales que pongan fin a este genocidio
.