Tapachula, Chis. La caravana de migrantes, integrada por unas mil 500 personas, llegó este viernes al municipio de Mapastepec, luego de recorrer 35 kilómetros desde Escuintla, en Chiapas.

El contingente se redujo, ya que muchos no esperaron a los que se han detenido, por lo que tuvieron que seguir su camino por cuenta propia.

“Nosotros ya estamos en Arriaga, nos venimos mejor, decidimos no esperar. Fuimos transbordando en combi”, dijo vía telefónica la hondureña Fiorela Córdoba, quien viaja con dos hijos -una bebé de tres meses-, sus tres hermanos y su madre.

Al menos 500 migrantes aceptaron ayer la oferta del Instituto Nacional de Migración (INM) de atender a las familias con apoyo del sistema DIF, luego de un bloqueo carretero de más de 30 horas a la altura del Centro de Atención al Tránsito Fronterizo.

El proceso avanza y en breve podrían darles algún tipo de documento, dijo Irineo Mújica, de la organización Pueblo Sin Fronteras.

“Fue un gran logro para las familias, fue la población más vulnerable la que aceptó, era necesario porque había niños con cuadros graves de deshidratación, eran familias que estaban en situación de calle en Tapachula”, explicó el activista.

Pero también lamentó que el INM no haya resuelto otorgar permisos de tránsito al resto de la Caravana y los obligue a seguir caminando.

“Debería de haber algún tipo de responsabilidad del Estado para regularizar a estas personas porque está en riesgo sus vidas”, expresó Mújica.

Sostuvo que el primer objetivo de la caravana es llegar a Oaxaca y ahí evaluarían si continuar como contingente o que cada familia busque la forma de seguir su camino hacia su destino.

La caravana salió con unas 5 mil personas el lunes 30 de octubre desde Tapachula, en la frontera con Guatemala, donde los migrantes llevaban meses intentado realizar trámites ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados y el INM, pero las citas tardaban meses.