Ciudad de México. El pequeño comercio de Acapulco requiere alrededor de 5 mil millones de pesos de financiamiento, pues al menos unos 100 mil establecimientos fueron dañados por el huracán Otis, señaló Gerardo Cleto López Becerra, presidente del Consejo para el Desarrollo del Comercio en Pequeño (ConComercioPequeño).
Luego de que algunas tiendas de autoservicio y departamentales retomaron sus actividades en el puerto guerrerense, el dirigente del sector comercio pidió a las autoridades poner en práctica un plan urgente de apoyo al pequeño comercio, pues no cuentan con la misma estructura, financiamiento y capacidad de organización de las grandes empresas.
“Sin un plan real de apoyo que incluya financiamiento para reponer tanto mercancía perdida como maquinaria, hornos, refrigeradores, licuadoras, estufas y todo lo que el giro mercantil utilizaba para realizar sus actividades, será muy difícil que los casi 100 mil negocios afectados vuelvan a la luz con la rapidez que lo están haciendo las grandes empresas”, indicó.
Abundó que las empresas que surten mercancías no pueden empezar a hacer sus rutas porque muchas de las tiendas desaparecieron o el local está en malas condiciones.
Destacó que sólo el comercio en pequeño requiere una inversión de más de 5 mil millones de pesos con planes de financiamiento accesibles.
Alberto Vargas, presidente del Movimiento Nacional del Contribuyente Social 17 de Marzo, que agrupa a comerciantes de mercados públicos, señaló que los techos de los mercados públicos desaparecieron, las instalaciones eléctricas están inservibles o perdieron los refrigeradores y vitrinas.
Ambos dirigentes, coincidieron en señalar que los centros de abasto se tienen que volver a organizar para impulsar la reactivación paulatina de los sistemas de comercialización y consumo.
López Becerra recomendó a los negocios entablar alianzas estratégicas con comercios vecinos, para compartir áreas en tanto se lleva a cabo la reconstrucción de locales, plazas comerciales o demás espacios.
López Becerra reconoció que en este tipo de coyunturas es común que se presenten “buitres” que pretenden “sacar raja de la situación”, por lo que pidió a los comerciantes a mantenerse firmes y no caer en peligrosas tentaciones que pudieran ofrecerles el crimen organizado (como vender mercancía robada o ilegal), toda vez que son salidas falsas con graves consecuencias para ellos y hasta para sus propias familias.