San Diego. La final de la liga estadunidense de futbol femenil (NWSL) este sábado en San Diego, California, será escenario para una despedida de ensueño de Megan Rapinoe, en momentos en que el soccer ingresa a una nueva era.
Gracias a su victoria sobre el San Diego Wave FC en semifinales, el OL Reign de Seattle prolongó por unos días la carrera de Rapinoe, que bajará la cortina a su exitoso andar en el futbol en la final de la liga entre su equipo y el NJ/NY Gotham FC.
"Va a ser mi último partido. Es el final soñado, lo único que resta es ganar", se alegró Rapinoe el domingo tras el triunfo 1-0 en semifinales.
La delantera de 38 años, activista feminista y una ferviente luchadora por los derechos LGBT+, tendrá en el último partido de su carrera la oportunidad de ganar un título que falta en su vitrina.
Oro olímpico en 2012 y campeona del mundo en 2015 y 2019, año en el que fue nombrada mejor futbolista del mundo, Rapinoe se despidió de la selección de Estados Unidos en septiembre.
Con su selección, la atacante cerró una carrera de 17 años en la que sumó 203 partidos internacionales y 63 goles. Sin embargo, se marchó del combinado estadunidense con el sabor amargo de caer ante Suecia en octavos de final del Mundial de Austalia y Nueva Zelanda de 2023.
Rapinoe falló un penal en la definición que dejó a Estados Unidos sin la posibilidad de luchar por su tercer título mundial al hilo.
Nueva era
Ya sin acción con su selección, Rapinoe tendrá su cierre definitivo el sábado en momentos en que la liga estadunidense está entrando a una nueva dimensión, en especial financiera.
La NWSL anunció el jueves que vendió los derechos de retransmisión por 240 millones de dólares por cuatro años a ESPN, CBS, Prime Video y Scripps, es decir, un monto que supera 40 veces el contrato actual. El nuevo contrato prevé la retransmisión de 118 partidos por temporada, en lugar de 30.
"Este acuerdo cambia profundamente las cosas para nuestro campeonato y para las futbolistas que pisan sus campos cada fin de semana", comentó la comisionada de la NWSL, Jessica Berman.
Logramos el objetivo de "poner los partidos a disposición de los aficionados y de una nueva audiencia (...) generando al mismo tiempo los ingresos que nuestras jugadoras merecen y nuestros inversores esperan", agregó.
El último partido de la vieja era será una batalla por el título protagonizada por Gotham y OL Reign, dos equipos “sorpresa” que terminaron sexto y cuarto, respectivamente, en la temporada regular, y que en semifinales consiguieron vencer a domicilio a los mejores clubes previo a los playoffs (Portland y San Diego).
El retiro de Rapinoe no será el único adiós de la noche. También será el último partido para Ali Krieger (39 años), capitana del Gotham y otra figura emblemática del soccer que se va con 108 partidos internacionales y siendo bicampeona mundial.