Esta semana se publicó el trabajo “Análisis geoespacial de la accesibilidad a centros urbanos de las localidades de México”, realizado por expertos del Instituto Mexicano del Transporte, del Centro de Investigación en Ciencias de Información Geoespacial y de la coordinación de Población, Planeación y Desarrollo de la secretaría general del Consejo Nacional de Población (Conapo). Además se recibieron comentarios e insumos de Adolfo Sánchez y Javier Delgado, investigadores de la UNAM.
El análisis de la accesibilidad y la estimación de los tiempos de traslado a los centros urbanos es de gran relevancia para la planificación, el ordenamiento territorial y la investigación social, factor que impacta en múltiples dimensiones el nivel y calidad de vida de la población. La accesibilidad tiene efectos directos en el acceso diferencial de quienes viven en distintos tipos de localidad: en las oportunidades económicas de empleo, la compra-venta de productos, el uso de infraestructura y de servicios localizados en el espacio geográfico, tales como de los de educación, salud, abasto, recreación y cultura.
Entre los antecedentes más relevantes está el estudio de los “Centros proveedores de servicios” (2002), y otro del Instituto Mexicano del Transporte y el Servicio de Información Agroalimentario y Pesquera (2016) que superó mediciones previas que no consideraban la pendiente en las mediciones, sino que calculaban las áreas de influencia como distancias lineales, como si el territorio mexicano fuera plano. Otro insumo fundamental es “El continuo de elevaciones mexicano” publicado por el Inegi, el cual identificó que 7 millones de personas vivían en condición de aislamiento geográfico en 79 mil localidades.
Para la actual publicación sobre accesibilidad se construyó un indicador resumen de los tiempos de traslado de la población hacia centros urbanos de diferente tamaño, categorizados en cinco grados que permiten cuantificar la accesibilidad, y un valor de tiempo –minutos u horas– o por un valor ordinal. Se trata de patrones clave para establecer parámetros de atención hacia los asentamientos humanos con menos acceso a bienes y servicios.
México se ha caracterizado por tener un patrón de distribución territorial polarizado: alta concentración de población en un reducido número de ciudades que coexisten con miles de localidades rurales dispersas. Para 2020, 90 por ciento de las localidades del país son pequeñas, tienen menos de 500 habitantes, en las cuales viven 10.4 millones de personas. Hay, en contraste, 17 ciudades que concentran más de un millón de habitantes, mientras 64 millones viven en ciudades de 15 mil habitantes o más. Suman 6.8 millones de personas las que viven en 48 mil localidades con grados de accesibilidad bajo y muy bajo (5.4 por ciento de la población), se trata de usuarios potenciales de los programas de bienestar social; un volumen equivalente a la población de Nicaragua o El Salvador (Banco Mundial, 2022).
Las localidades con grados de accesibilidades más bajos son las más pequeñas (88 por ciento tienen menos de 250 habitantes) y las localizadas en zonas montañosas: en la Sierra Madre Occidental en Chihuahua, Sonora, Durango, Sinaloa, Nayarit, Zacatecas y Jalisco; la Sierra Madre del Sur desde Guerrero hasta Oaxaca y sur de Puebla, la región de la Huasteca y las zonas agrestes de Chiapas. Con baja accesibilidad están también las del altiplano: partes de Chihuahua, Durango, Coahuila, Zacatecas y San Luis Potosí, y algunas zonas relativamente planas en áreas de Tamaulipas, sur de Veracruz, la selva de Chiapas, oriente de Tabasco y centro-sur de la península de Yucatán.
Las localidades indígenas tienen las peores condiciones de acceso a centros urbanos y, en aquellas con alta presencia de población afrodescendiente, dos de cada cinco tienen bajo y muy bajo grado de accesibilidad. En contraposición, las localidades con nivel de accesibilidad muy alto se ubican alrededor de los centros urbanos en zonas planas: Ciudad de México, Morelos, Aguascalientes, Colima y Guanajuato.
La publicación contempla un apartado conceptual y metodológico, análisis de resultados por entidad federativa, municipio y localidad, archivos digitales, anexos estadísticos y cartográficos (disponible en: https://acortar.link/ JC8gG3).