Ciudad de México. De los 10 eventos catastróficos por los que más ha pagado la industria aseguradora en el país, cuatro han sido huracanes, que en su conjunto han significado un monto total de 5 mil 887 millones de dólares, indicó la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS).
Datos del organismo indican que por el huracán Wilma, ocurrido en 2005, las aseguradoras desembolsaron 2 mil 675 millones de dólares, mientras que con Odile, esas empresas pagaron mil 439 millones de dólares en el año 2014.
Con Gilberto, en 1988 las instituciones de seguros pagaron mil 299 millones de dólares y con Isidore en 2002, el monto pagado ascendió a 474 millones de dólares.
El año pasado el monto de siniestros de riesgos hidrometeorológicos sumó 2 mil 200 millones de pesos, de acuerdo con datos de la AMIS, aun cuando no se registraron eventos catastróficos mayores.
México es uno de los países con mayores riesgos por fenómenos naturales, según los registros de la Organización para las Naciones Unidas (ONU), por lo que Norma Alicia Rosas, directora general de AMIS dijo que al estar asegurados, gobiernos, empresas y familias reciben la suma asegurada, gracias a lo cual tienen mayor capacidad de reacción y recuperación ante un desastre.
La AMIS explicó que los seguros hidrometeorológicos cubren el daño directo a los inmuebles, pero también hay coberturas a los contenidos, a los equipos electrodomésticos, de cómputo; así como por otras pérdidas como remoción de escombros, gastos extraordinarios, entre otras más.
En los 17 estados más afectados por eventos hidrometeorológicos, los giros de negocios que más han sido perjudicados son las oficinas (24.3 por ciento), fábricas (21 por ciento), viviendas (19.7 por ciento), hoteles (11.6 por ciento) y almacenes (9.9 por ciento), según cifras de la Asociación.
“La atención de siniestros asegurados en hogares, pequeñas y medianas empresas, hoteles, centros comerciales y otras entidades empresariales es crucial para impulsar la recuperación oportuna de toda una comunidad”, dijo Rosas.
“Contar con los recursos que ofrece el seguro no sólo favorece la reactivación económica a nivel individual, familiar y empresarial, sino que también resulta fundamental para fortalecer la resiliencia de Acapulco”, agregó.
La AMIS recordó que actualmente los huracanes se intensifican en periodos mucho más cortos que en el pasado y para este año la Comisión Nacional del Agua estimó que el número de huracanes en México se incrementará 30 por ciento.