Tel Aviv. Uno de cada tres hospitales de Gaza está cerrado y otros dejarán de prestar servicios en las próximas horas, debido a la falta de combustible, informó Naciones Unidas. Los médicos, por su parte, advierten que los pabellones podrían convertirse en tumbas masivas
.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) llamó a un cese del fuego humanitario inmediato y a permitir el paso seguro de suministros y combustible para generadores a la franja de 42 kilómetros de largo, la cual Israel ha transformado en un sitio de castigo y ataques aéreos constantes.
La OMS precisó que las reservas son tan escasas que seis hospitales han cerrado en la franja. Muchos más suspenderán operaciones en las próximas horas si no reciben combustible. Eso pondrá en peligro de muerte a miles de pacientes vulnerables, entre ellos 130 bebés prematuros, mil pacientes que dependen de diálisis y quienes están conectados permanentemente a máquinas de soporte a la vida. Estamos suplicando de rodillas por una operación humanitaria sostenida, incrementada y protegida
, expresó el jefe de emergencias regionales de la OMS, Rick Brennan.
Los ataques israelíes del lunes al martes causaron la muerte de 700 palestinos, según el Ministerio de Salud de Gaza, operado por Hamas. Es la cifra de muertos en 24 horas más alta desde que Israel lanzó su campaña de bombardeos, hace tres semanas. En total, más de 5 mil 700 palestinos han perecido a la fecha, entre ellos unos 2 mil 300 menores, según las autoridades. La cifra incluye la cantidad de muertos por la explosión en un hospital, la semana pasada, cuya autoría se achaca un bando al otro. Israel afirmó haber lanzado 400 ataques aéreos en las horas recientes, en los cuales confirma haber dado muerte a comandantes de Hamas y a militantes que se preparaban a lanzar cohetes hacia su territorio.
Hay preocupación de que muchas más personas fallezcan cuando los centros médicos se vean obligados a cerrar. El único centro médico de oncología en la franja funciona parcialmente, debido a la falta de combustible, lo que pone en riesgo a 2 mil pacientes con cáncer.
El lunes, el Hospital Indonesio, privado, el mayor en el norte de Gaza, se vio forzado a apagar prácticamente todo, excepto la unidad de cuidados intensivos, debido a la carencia de combustible para los generadores. El único otro nosocomio que todavía atendía a pacientes en la franja, el Beit Hanoun, cesó operaciones debido al intenso bombardeo de la ciudad. En total, el Ministerio de Salud dijo que 40 centros médicos han suspendido operaciones en un momento en que los bombardeos y desplazamientos ponen bajo tremenda presión al sistema de sanidad.
Ghassan Abu Sitta, médico británico-palestino que trabaja con Médicos sin Fronteras, señaló que la situación en Al-Shifa es tan precaria que los médicos y cirujanos han tenido que improvisar a todos los niveles
, incluso usando líquidos limpiadores para lavar heridas. El número de heridos es astronómico, comparado con el tamaño del hospital
, declaró a The Independent. El mayor complejo médico de Gaza está a 150 por ciento de su capacidad y además brinda albergue a miles de civiles que han sido desplazados por los bombardeos.
Los heridos están por todas partes, tendidos en colchones, en el suelo de los pabellones y en los corredores y la zona de urgencias
, añadió. Declaró que el equipo médico improvisa en todos los niveles. Cuando tengo un paciente que quiero preparar para cirugía, primero lo lavo con líquido que compré en la tienda de la esquina y luego lo enjuago con vinagre para asegurar que esté libre de gérmenes
. Sólo después puede usar un poco de antiséptico de base yodo.
El siguiente problema es la energía, al agotarse el combustible para generadores. Si nos quedamos sin electricidad, el hospital Shifa será una tumba masiva
, añadió.
© The Independent
Traducción: Jorge Anaya