Ciudad de México. La cartera de crédito empresarial podría crecer 10 por ciento más en los siguientes cuatro años si México logra concretar todas las oportunidades que provienen del fenómeno de la relocalización de empresas, mejor conocido como nearshoring, estimó Julio Carranza, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM).
En conferencia, indicó que hasta este momento el nearshoring ha traído al país un total de 174 anuncios de inversión por un monto que suma los 74 mil millones de dólares.
“Si México logra concretar el impulso a la Inversión Extranjera Directa y aumentar las exportaciones, en los próximos cuatro años, el nearshoring podría impulsar una mayor demanda de crédito empresarial en diversos sectores económicos, primordialmente los beneficiados por el decreto de Hacienda”, dijo Carranza.
En este sentido, consideró que la demanda por financiamiento iría al alza, y al portafolio actual de los préstamos empresariales se le sumarían 307 mil millones de pesos, toda vez que 239 mil millones provendrían de los proyectos y 68 mil millones por los incentivos fiscales que ha promovido el gobierno.
“México está de moda, todo mundo quiere invertir en México, es muy claro el por qué pasa esto. Los grandes inversionistas quieren inyectar sus recursos y buscan donde hacerlo, México es un país estable, con indicadores muy fuertes, la economía está creciendo, y debemos cuidar que todos los beneficios nos lleven a aprovechar el gran potencial que tenemos para crecer”, apuntó.
Así, la ABM espera que el crecimiento económico del país se sitúe en un promedio de 3.2 por ciento, que resulta mayor al pronóstico que tenían los mercados y analistas a inicios de año, que era de 1.7 por ciento.
Por su parte, Daniel Becker, vicepresidente de la ABM, mencionó que si bien, el gobierno ha dado impulso al sureste del país con los proyectos de infraestructura, una vez que estos se concluyan la demanda por financiamiento desacelerará en esas zonas, motivo por el cual se debe apuntar a la relocalización de empresas.
“El sureste ha crecido básicamente por los proyectos de infraestructura, en el momento que lleguen a su fin veremos una disminución en el crédito, salvo que pase lo que ocurrió en la península de Yucatán por la demanda de gas. El sureste necesita infraestructura suficiente para que este sea un detonador del crecimiento del nearshoring”, refirió Becker.