El presidente Andrés Manuel López Obrador condenó el influyentismo de los hermanos Gerard, incluido el cuñado del ex presidente, Carlos Salinas, que aprovecharon ese parentesco para beneficiarse del presupuesto público. Estimó que anualmente reciben entre dos o tres mil millones de pesos derivados de sus contratos de arrendamiento de hospitales al sector público.
En conferencia, al hablar sobre el influyentismo que había durante los gobiernos del "PRI-AN" , criticó que los Gerard haya obtenido estos contratos, como el de un hospital de Ixtapaluca, rentan hospitales y hay que pagarles por eso. Además, les dieron concesiones de carreteras, tenían contratos en el extinto aeropuerto de Texcoco, "por eso se enojaron tanto" y hasta un bloque para la extracción de petróleo alcanzaron con la reforma energética.
"Ni siquiera tardaron mucho, lo vendieron, pero les dieron su agosto" apuntó el Presidente durante su conferencia.