La Pequeña Amal, un títere de unos 3.5 metros de altura que representa a una niña refugiada siria de 10 años, visitará México del 6 al 26 de noviembre donde recorrerá siete ciudades. Tijuana, Monterrey, Guadalajara, Zapopan, Ciudad de México, Oaxaca y Tapachula, para reunirse con diversas comunidades, figuras públicas y agrupaciones artísticas.
Será el primer país latinoamericano donde se presentará para llevar un mensaje de esperanza, tolerancia y solidaridad a miles de personas que se han visto forzadas a dejar su hogar y familias, a causa de las guerras, la violencia y persecución.
Ha sido producida por The Walk Productions -con sede en Reino Unido-, en asociación con la Compañía Handspring Puppet -en Sudáfrica- y está dirigida por el productor Romain Greco.
La marioneta de Amal -inspirada en las mojigangas mexicana, según sus diseñadores- ha cautivado a más de un millón de personas en más de 120 ciudades desde que emprendió la marcha en Turquía, donde se han refugiado miles de habitantes de Siria, a causa de la guerra civil que comenzó en 2012.
Actualmente se encuentra en Estados Unidos, en un viaje de dos meses que finalizará el 5 de noviembre en San Diego para llegar al día siguiente a Tijuana. Desde la frontera norte hasta la sur de México, se reunirá con niñas, niños, jóvenes, migrantes y refugiados de todas las edades; además de colectivos, que buscan crear conciencia entre la sociedad sobre los momentos difíciles que viven las personas, sobre todo menores, que se ven obligados a abandonar su lugar de origen.
“México, al igual que Estados Unidos, es un país que ha sido moldeado e impactado por una historia de migración. En ambos casos, es una historia de promesas y desafíos”, dijo el director artístico de The Walk Productions, Amir Nizar Zuabi.
Su travesía mexicana cuenta también con el apoyo de distintas agencias de la ONU, entre ellas, la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la Organización Internacional para las Migraciones (OIM/ONU Migración) y la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).