La incorporación de los trabajadores de la salud al organismo IMSS-Bienestar reduciría en 40 por ciento nuestros salarios y en 70 por ciento en prestaciones, de acuerdo con el actual tabulador de la Secretaría de Salud Federal, con lo que se “universaliza la degradación laboral de este sector”, denunciaron.
Durante una manifestación que realizaron frente a las oficinas del Instituto Mexicano del Seguro Social y después en la Secretaría de Hacienda, explicaron que el gobierno federal realizó “mezclas” para homologar las categorías con las más baratas.
Con ello, afirmaron, “a todos nos degradaron, ya no hay escalafón en ninguna categoría, a la cual ascendías mediante tu profesionalización, pero ahora solo hay una; y nuestras condiciones generales son 70 por ciento más baratas”.
El Gobierno de la Cuarta Transformación quiere un sistema de salud como Dinamarca, pero a los trabajadores les sigue pagando como en México, porque con esta incorporación “no hay mejoras laborales, pero los gobernadores siguen firmando este acuerdo”, señalaron.
Fabián Infante, licenciado en enfermería, reconoció que los trabajadores no están respondiendo de las convocatorias, porque en los tabuladores estatales les pagaban en promedio a todos entre 10 mil y 12 mil pesos mensuales y ahora les ofrecen entre 23 mil y 38 mil, dependiendo la carrera o la profesión.
“Es un buen gancho, porque se te duplicó el salario y aparte te dieron una base, pero si lo comparas con el sistema federal te das cuenta que es una trampa, porque estás teniendo un empleo degradado, donde el gobierno federal es el único que gana”, abundó.
Con ello, sí tienes una base, pero “el gobierno ganó al rebajarte el salario 40 por ciento y las prestaciones 70 por ciento en comparación con lo que existe actualmente y al sindicato le llevará entre 30 y 50 años conseguir lo que ahora tenemos los trabajadores de base federal”.
Además de no cumplir con el compromiso de basificar a 87 mil trabajadores al final de este sexenio, pues a lo más que se llegará será a 30 mil, dejando un pendiente a la siguiente administración federal, con lo que continuarán los contratos eventuales. Afirmó.
Integrantes de la Alianza de Trabajadores de la Salud, por su parte, denunciaron que la creación de IMSS Bienestar genera una amplia incertidumbre, pues no se toma en cuenta a los trabajadores y se les está reubicando en las peores condiciones.
La desigual relación laboral ya generó amplias movilizaciones de trabajadores en distintos estados y la Ciudad de México demandando garantías sobre sus plazas y el reconocimiento de su antigüedad; así como certidumbre en sus percepciones salariales.
Señalaron que, apoyan el abasto y distribución amplia y oportuna de los medicamentos en la población, pero también denunciaron el abandono de instituciones públicas dedicadas a reasumir la generación de insumos biológicos para su producción.
Los trabajadores de la salud, dijeron, estamos de acuerdo en ofrecer una mayor calidad en el servicio a todos los mexicanos; sin embargo, será difícil si no se liberan las sobrecargas de trabajo, mejoran las condiciones salariales y laborales y aumenta el personal.
Así como contar con mayor infraestructura, recursos y equipo para brindar una atención de calidad a todos los mexicanos.
Mencionaron que en materia de seguridad social, siguen sin solución sus pensiones, las cuales han sufrido un deterioro por su conversión en UMAS y una situación similar enfrentan con el FOVISSSTE, donde “lejos de solucionar el problema de la vivienda, nos ha endilgado deudas imposibles de pagar por los altos intereses”.