El Comité de Moléculas Nuevas (CMN) de la Cofepris inició ayer la evaluación de las vacunas contra el coronavirus SARS-CoV-2 causante de covid-19, como parte del trámite de solicitud de registro sanitario. Los expertos dieron su opinión favorable para el biológico desarrollado por la farmacéutica Pfizer, Comirnaty, monovalente actualizada con la cepa XBB.1.5, subvariante de ómicron, la cual se puede aplicar en personas de seis meses de edad en adelante.
En tanto, la decisión de los especialistas fue no favorable para la biológico del laboratorio AstraZeneca, denominado Vaxzevira, recombinante (se elabora por ingeniería genética). Es la misma formulación que en enero de 2021 obtuvo la aprobación para uso de emergencia en mayores de 18 años y de la que hubo mayor disponibilidad en el país. Fueron 112 millones de dosis, de las cuales más de la mitad se fabricaron en Argentina y México.
Los expertos del CMN consideraron que la empresa no aportó información actualizada sobre el nivel de protección que tiene esta vacuna ancestral
frente a las variantes que están en circulación.
Por la mañana, el presidente Andrés Manuel López Obrador comentó que están en curso los trámites para dar los permisos y quienes quieran comprar la vacuna lo puedan hacer
. La Cofepris recibió cuatro solicitudes de laboratorios para obtener el registro sanitario. Ayer, el CMN evaluó dos y hoy sesionará para dictaminar sobre dos solicitudes del laboratorio Moderna, una de ellas para una vacuna bivalente.
En la sesión sobre el fármaco de AstraZeneca, Juan Sierra, investigador del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, cuestionó la falta de datos sobre los eventos adversos registrados en la población. Planteó la necesidad de información sobre el beneficio específico en los adultos mayores, principal grupo de riesgo para presentar complicaciones graves y perder la vida por covid-19.
Los investigadores Arturo Galindo, de Nutrición, y Rogelio Pérez Padilla, del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, coincidieron con estos planteamientos y sobre la importancia de que los fabricantes actualicen la composición de sus vacunas.
En la sesión sobre la vacuna de Pfizer, Gustavo Reyes Terán, integrante del CMN y titular de la Comisión Coordinadora de los Institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad, recomendó que para garantizar la eficacia de esta propuesta se haga un seguimiento clínico para México, donde más de 70 millones de personas han estado expuestas al virus, sea por enfermedad o por aplicación de vacunas, lo que hasta ahora ha generado protección contra las formas graves de covid-19.
La situación mexicana es diferente a la de otros países por estas condiciones, así como porque han recibido al menos dos dosis y aunque las últimas fueron hace más de un año en muchos casos las hospitalizaciones y muertes por covid-19 se mantienen en niveles bajos.
Destacó que otro rasgo local es que se han aplicado más de cinco vacunas diferentes. De ahí la necesidad de una vigilancia específica sobre el efecto de la nueva vacuna de Pfizer en la gente vulnerable: adultos mayores, personas con un bajo sistema de defensas por enfermedades como cáncer, VIH o las autoinmunes, entre otras.