Ciudad de México. El sector industrial del país expresó su preocupación ante la reducción en la adquisición por parte de los hogares de bienes hechos en México como consecuencia del fortalecimiento del peso que se observó en meses recientes.
Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) muestran que en los primeros siete meses de 2023, el consumo privado en México creció 4.5 por ciento a respecto a igual período del año pasado.
No obstante “el gran problema es que el consumo de bienes nacionales cayó 0.3 por ciento, mientras que el de bienes importados creció 18.7 por ciento”. Ante este dato la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) expresó su preocupación, pues la cifra impacta en la generación de empleos.
“Necesitamos consumir lo hecho en México para que la fortaleza del mercado interno se traduzca en mayor crecimiento económico”, señaló.
La Concamin explicó que la reducción del consumo de los bienes producidos en el país se explica por la paridad peso-dólar, así como por las prácticas ilegales y desleales de comercio.
El organismo dirigido por José Abugaber Andonie instó al gobierno federal a seguir trabajando en una agenda que permita piso parejo para los fabricantes nacionales.
En septiembre la Secretaría de Economía (SE) emitió un decreto que busca resolver parte del problema, pues amplió aranceles a importaciones de los sectores calzado, vestido, textil, entre otros.
De acuerdo con la información más reciente del Inegi, el mayor crecimiento de bienes importados se observó en los clasificados como duraderos, los cuales en el acumulado de los siete primeros años avanzó 20.9 por ciento frente a igual lapso del año pasado, mientras que los que son de poca duración crecieron 20.5 por ciento a tasa anual.
La Concamin también hizo un llamado “para trabajar juntos en programas de fomento al consumo de los bienes Hechos en México, porque es la manera de impulsar el crecimiento económico y de generar empleos en beneficio de las familias mexicanas”.