En septiembre, el sector manufacturero tuvo una caída de 2 por ciento, impulsado por una menor actividad en los sectores de fabricación de productos derivados del petróleo, fabricación de productos de minerales no metálicos y la industria de bebidas y tabaco, dio a conocer BBVA México.
Al presentar el Indicador multidimensional de la manufactura BBVA, el banco indicó que el dato anterior sugiere que en los primeros nueve meses del año el sector ha tenido un crecimiento de uno por ciento, un dinamismo menor si se considera que entre enero y septiembre de 2022, el avance era de 4.9 por ciento.
“Si bien la estimación del indicador de septiembre apunta hacia una caída de 0.6 por ciento en el tercer trimestre, con respecto al trimestre inmediato anterior (abril a junio), los indicadores adelantados de actividad manufacturera en Estados Unidos anticipan un mejor desempeño del sector hacia adelante, ante los apoyos gubernamentales a la industria en ese país y la resiliencia de la demanda interna”, precisó.
Destacó que las ventas minoristas en Estados Unidos aún muestran variaciones positivas, y el segmento de automóviles aumentó a una tasa de 0.6 por ciento en septiembre con relación al mes inmediato anterior.
El banco explicó que, de acuerdo con cifras del Inegi, en el mes de agosto los subsectores de la manufactura cuya producción aún se encuentran muy por debajo de su nivel previo a la pandemia son la industria de la madera, la fabricación de prendas de vestir y la fabricación de productos e insumos textiles.
En sentido opuesto, los segmentos que mayor avance han mostrado con respecto a su nivel previo a la crisis sanitaria se encuentran la fabricación de derivados del petróleo, el segmento de maquinaria y equipo y la fabricación de aparatos eléctricos.
En términos de capacidad utilizada, once de los veintidós subsectores aún se ubican en niveles por debajo de su cifra previa al Covid, entre los que sobresale el segmento de fabricación de prendas de vestir, la fabricación de productos a base de minerales no metálicos y la industria química.
A su vez, dijo el banco, los segmentos de fabricación de derivados del petróleo, de fabricación de equipo de cómputo y comunicaciones, y la fabricación de maquinaria y equipo, sobresalen por haber superado con amplitud el nivel de capacidad utilizada registrado previo a la pandemia.
Así, BBVA anticipa que la mejor perspectiva para la actividad manufacturera en Estados Unidos ante la resiliencia de la demanda de bienes duraderos en ese país y los apoyos gubernamentales a la industria, tendrá un efecto favorable sobre el sector manufacturero en México.
“A lo anterior se suma la expectativa de relocalización de la producción de las cadenas globales de valor, en los próximos años. Mantenemos nuestra previsión de crecimiento del PIB en 3.2 por ciento para 2023 y 2.6 por ciento para el próximo año”, añadió el banco.