Ciudad de Guatemala. Una persona falleció y por lo menos dos más fueron heridas por arma de fuego el lunes en las inmediaciones de una de las protestas de Guatemala que exigen la renuncia de la fiscal general del país, criticada por entrometerse en el proceso electoral, según confirmó un vocero de los bomberos voluntarios que atendieron a los afectados.

Las víctimas estaban cerca de donde se realizaba una de las manifestaciones en el municipio de Malacatán, departamento de San Marcos, de acuerdo con Víctor Gómez, vocero del cuerpo de bomberos que estaba de turno. No está claro si el fallecido y los heridos por disparos participaban en la protesta o sólo pasaban por el lugar.

En varios videos que circularon en redes sociales se escuchan ráfagas de disparos y se ve a personas de civil y agentes de la policía salir huyendo. En una de las grabaciones, también se ve cómo se incendia un vehículo y una patrulla policial.

La presidencia guatemalteca se pronunció y dijo que se están “elaborando las investigaciones correspondientes, estaremos comunicando los detalles oportunamente” sobre los incidentes, que desataron críticas en redes sociales que atribuían la responsabilidad a empleados estatales.

Las protestas en contra de la fiscal general, Consuelo Porras, y de la actuación judicial dirigida al proceso electoral, a las autoridades electorales y al partido Movimiento Semilla, del presidente electo Bernardo Arévalo, se mantuvieron el lunes en su tercera semana de movilizaciones.

El domingo grupos que protestaron en la Plaza de la Constitución en la capital guatemalteca a favor de Porras llamaron a usar la fuerza contra los cierres de carreteras que tienen bloqueado el país como medida de protesta.

El lunes, en por lo menos tres puntos de cierres de carreteras, hombres vestidos de civil con machetes y portando los mismos cárteles que los usados en la protesta en la capital arremetieron contra manifestantes en el municipio del Asintal en Retalhuleu, según vídeos que se publicaron en redes sociales.

La fiscal general informó a periodistas que pidió la destitución del ministro de gobernación, Napoleón Barrientos, al que señala de no acatar un fallo de la Corte de Constitucionalidad para que desbloquee, incluso usando la fuerza, las carreteras que por 15 días se mantienen cerradas por las protestas. “En aras del orden público”, dice su petición.

La fiscal insiste en que se desaloje a miles de indígenas que están acampando desde hace 15 días frente al edificio del Ministerio Público pidiendo su renuncia, la de sus fiscales Rafael Curruchiche y Cinthia Monterroso y la del juez Fredy Orellana, a quienes señalan de judicializar el proceso electoral y socavar la democracia.

Las acciones de la fiscalía han sido rechazadas casi de forma generalizada a nivel nacional e internacional. Una misión de la OEA mantiene una mesa de diálogo para buscarle una salida a las demandas de su renuncia y la judicialización que mantiene la fiscalía del proceso electoral.

El presidente electo Arévalo ofreció entre sus propuestas de campaña luchar contra la corrupción e impunidad, también dentro de la fiscalía.

Arévalo dijo en un mensaje en cuenta de la red social X, antes conocida como Twitter, que condenaba la violencia de grupos de choque presenciada en San Marcos. “Exigimos a las autoridades que velen por la seguridad de quienes pacíficamente se manifiestan y se garantice que este hecho no quede impune”, dijo.