Cientos de personas que se solidarizan con los rehenes tomados por Hamas y sus familias protestaron ayer frente a la base militar israelí de HaKirya, en Tel Aviv, contra el manejo de la crisis por parte del primer ministro Benjamin Netanyahu, informó la prensa local.
Quiero que Benjamin Netanyahu y toda su gente regresen a casa porque han abandonado a los residentes del sur y no están interesados en las vidas de quienes viven allí, están obsesionados con la pequeña política
, expresó la activista Mónica Levy al portal The Times of Israel. Agregó que el premier y su administración están más interesados en su propia supervivencia que en gobernar.
Levy es sobreviviente de un mortal atentado con bomba en la línea 5 de autobús de Tel Aviv en 1994, y la hija de su primo fue asesinada en el festival de música de Re’im, donde Hamas mató a 260 israelíes.
Con gritos como “¡Ve a la cárcel, Bibi!”–como se conoce a Netanyahu– mostraron apoyo a las familias de los asesinados y ayuda a los cautivos de Hamas. Entre la multitud, de acuerdo con el portal, en otros carteles se leía: “Bibi, tienes sangre en tus manos”, Hemos sido abandonados
, Devuelve a los rehenes inmediatamente
y No hay confianza, renuncia
. Una protesta similar se realizó anteanoche en esta misma capital, de acuerdo con la cadena ABC News.
Un manifestante solitario a favor de Netanyahu gritó a la multitud su apoyo al gobierno y la policía rápidamente lo separó.
Judíos de comunidades lejos de Israel se reunieron ayer en sinagogas para sus primeros servicios del sabbat desde que los extremistas de Hamas atacaron a Israel.
Los rabinos dirigieron oraciones de paz y compartieron el dolor con sus congregaciones. En muchos templos la seguridad fue estricta.
El mortal ataque de Hamas no es sólo otro acontecimiento geopolítico para el pueblo judío, explicó un rabino estadunidense. Está removiendo años de traumas viscerales, especialmente en Pittsburgh, ciudad marcada por el ataque antisemita más mortífero en la historia de Estados Unidos.
“Más judíos fueron asesinados en el último sabbat que en cualquier otro día desde el Holocausto”, dijo Daniel Fellman, del templo Sinaí, durante el primer oficio después de la violencia en Israel. No es que Hamas quiera la destrucción de Israel. Es que Hamas quiere destruirnos a ti y a mí. El mundo merece algo mejor, el pueblo palestino merece algo mejor y debemos hacerlo mejor.
Cerca de 400 palestinos han muerto en las pasadas 24 horas por ataques israelíes mientras miles de civiles tratan de abandonar la Ciudad de Gaza dirigiéndose al sur. Vía Graphic News