La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) expresó su “profunda preocupación y dolor por la escalada de violencia entre Israel y Palestina en los últimos días”. Hizo un “llamado urgente a la comunidad internacional para que ayude a restaurar el diálogo y la confianza entre israelíes y palestinos”, porque “sólo por medio de una solución negociada que atienda las causas profundas del conflicto se podrá alcanzar una paz duradera en Tierra Santa”.
A una semana de que iniciaron las agresiones, Rogelio Cabrera López, arzobispo de Monterrey y presidente de la CEM y Ramón Castro, obispo de Cuernavaca y secretario general del organismo episcopal indicaron que “queremos expresar nuestras más sentidas condolencias a las familias de todas las víctimas de este conflicto. Les aseguramos nuestras oraciones y cercanía espiritual en estos momentos de dolor”.
Asimismo, “condenamos enérgicamente cualquier ataque terrorista contra civiles inocentes. Al mismo tiempo, hacemos un llamado a las partes en conflicto a detener inmediatamente los ataques y buscar una solución pacífica basada en el diálogo y la justicia”.
Recordaron palabras del papa Francisco respecto a que “la violencia genera violencia. La guerra genera más guerra y la muerte más muerte” y reiteraron el llamado del pontífice a “orar intensamente por la paz y a que los líderes políticos escuchen “el grito de paz de la gente”.
Señalaron que “nos unimos al llamado del Santo Padre para que los fieles se unan en oración por la paz, especialmente a la iniciativa de un millón de niños rezando el rosario el próximo miércoles 18 de octubre, para implorar al Señor que ilumine a los líderes y abra sus corazones a la paz en el mundo”.