Debido al aumento de importación de aluminio en Estados Unidos, la industria de ese país solicitó al Departamento de Comercio y la Comisión de Comercio Internacional (USITC) una investigación antidumping y anti subvenciones a 15 naciones, entre las que se encuentra México, indicó la Cámara Nacional de la Industria del Aluminio (Canalum).
El organismo del sector privado indicó que tiene el conocimiento de que el pasado 4 de octubre la Coalición de Extrusores de Aluminio de Estados Unidos junto con la Unión de Trabajadores del Acero (USW) hicieron la solicitud, que presume que las importaciones de extrusiones de aluminio comercializadas en condiciones de competencia desleal están perjudicando al sector estadunidense.
La Canalum explicó que el crecimiento del sector en México se explica por la sustitución de importaciones que pusieron en práctica las empresas de toda la región como estrategia para garantizar la continuidad de las cadenas fundamentales de suministro.
Recordó que la industria del aluminio en territorio mexicano requiere de importaciones de aluminio primario, secundario y de chatarras, o del reciclaje por la recuperación de la chatarra nacional, para fabricar productos semiterminados, pues México no cuenta con bauxita ni fundiciones que permiten tener producción nacional primaria de aluminio.
Apuntó que el sector mexicano está altamente desarrollado en capacidad productiva debido a la inversión en maquinaria y equipo, además de que se está integrado en la región TMEC en sectores como el automotriz, el aeroespacial, de la construcción, el energético y el tecnológico.
La decisión de la industria estadunidense está en línea con las preocupaciones expresadas por la Oficina de Representación Comercial (USTR, por sus siglas en inglés) a México de mejorar el monitoreo del comercio de acero y aluminio.
De acuerdo con Canalum, en los próximos días la ITC recabará información a los países denunciados y establecerá una resolución preliminar.
“En caso de que las instituciones norteamericanas formalicen esta solicitud, y según las pautas de la Secretaría de Economía, se abrirán los correspondientes espacios de interlocución y de intercambio de información entre las partes, a los que la Canalum convocará a los industriales de la extrusión para sumar esfuerzos y defender los intereses nacionales de nuestro sector”, dijo.
El organismo señaló que respeta el derecho de las empresas estadunidenses de vigilar cualquier situación que afecte sus negocios, pero dejó en claro que “las empresas mexicanas trabajan de forma legal”, respetan el T-MEC y trabajan con el Programa de Control Aduanero y Fiscalización (PROCAFIS) del Servicio de Administración Tributaria (SAT) para ratificar que las operaciones de importaciones y exportaciones de productos de aluminio se llevan a cabo en condiciones legales.