Tapachula, Chis. Migrantes varados en la frontera sur realizaron una vigilia para orar por los que han muerto en la ruta hacia Estados Unidos, y pedir al Gobierno de México que les permitan el libre tránsito para no exponerse a los peligros de la travesía en busca del sueño americano. 

Bajo una intensa lluvia y resguardados en un domo del parque Bicentenario en Tapachula, Chiapas, los extranjeros principalmente de Centro y Sudamérica encendieron velas y elevaron plegarias para sensibilizar a las autoridades a que resuelvan su situación.  

“Queremos ayuda, queremos papeles, queremos el permiso”, clamaron. Alfredo Funes, de Honduras, dijo que en su país el ingreso que obtenía como carpintero no le alcanzaba para sostener a su esposa y sus dos hijos por lo que decidió emprender la travesía. 

“En el camino nos asaltan, si no anda dinero uno lo golpean y a veces hasta lo matan a uno”, dijo el hombre de 47 años de edad. La pareja de colombianos Michael Castro y Keterine Rozo huyeron de su país ante la amenaza de grupos de la delincuencia y guerrilleros que pretendían reclutarlos. 

Los jóvenes de 21 años, él ex militar y ella trabajadora de limpieza, cuentan que no tuvieron más opción que dejar a su familia porque estaba en riesgo su vida. Durante la protesta, la policía municipal detuvo a un hondureño a quien acusaba de haber realizado sus necesidades fisiológicas en la vía pública, lo que provocó el reclamo de migrantes, por lo que fue liberado. 

Irineo Mújica, de la organización Pueblo Sin Fronteras, dijo que los migrantes se enfrentan a precariedades durante su paso por México y ante la falta de documentos tienen que arriesgarse a seguir su camino con traficantes arriesgando incluso la vida. 

“Definitivamente la contención los está matando, aquí en Tapachula está contención. La gente que está tratando de salir de alguna manera en autobuses irregulares, en trailer y el crimen organizado está disparado en todo el país”, advirtió el activista. 

Pidió a la Comisión Estatal y Nacional de Derechos Humanos resolver de inmediato la petición de medidas cautelares solicitadas el martes para garantizar la seguridad de los migrantes varados en la frontera sur mientras resuelven su situación de legal estancia o deciden organizarse en una nueva Caravana.