Los Ángeles. Jada Pinkett Smith y su esposo Will Smith han vivido “vidas completamente separadas” desde 2016, reveló Pinkett Smith en una entrevista con Hoda Kotb. La famosa pareja de Hollywood se casó en 1997 y ha abordado separaciones y problemas matrimoniales, pero nunca había revelado su separación.

Aunque no es un divorcio legal, Pinkett Smith le dijo a Kotb en un fragmento transmitido el miércoles en “Today” que es esencialmente un divorcio sin papeles. Smith y Pinkett Smith comparten dos hijos, Willow y Jaden, así como un hijo, Trey, del primer matrimonio de Smith.

Los representantes de Smith y Pinkett Smith no respondieron a una solicitud de comentarios.

La noticia fue una sorpresa para muchos, considerando la franqueza de Pinkett Smith en su serie “Red Table Talk”, en la que ella y Smith abordaron una relación extramatrimonial de Pinkett Smith en un episodio de 2020, y la bofetada en los Premios de la Academia de 2022. En la ceremonia, Smith subió al escenario y golpeó al presentador Chris Rock después de que Rock hiciera una broma sobre el cabello de Pinkett Smith.

La entrevista completa se transmitirá en un especial de una hora en horario estelar de NBC News el 13 de octubre a las 8 p.m. de Nueva York (000 GMT). Pinkett Smith también tiene un libro de memorias, “Worthy”, que se publicará el 17 de octubre, que promete más detalles sobre sus vidas y su relación, así como sobre su educación en Baltimore.

Pinkett Smith le dijo a Kotb que, “Cuando llegamos a 2016, estábamos agotados de intentarlo. Creo que ambos estábamos atrapados todavía en nuestra fantasía de lo que pensábamos que debería ser la otra persona”.

Pinkett Smith agregó que, aunque está considerando el divorcio, no ha podido seguir adelante con ello.

“Hice una promesa de que nunca habrá una razón para que nos divorciemos. Intentaremos superar... lo que sea”, dijo.

En una nueva entrevista con la revista People, Pinkett Smith también dijo que inicialmente pensó que la bofetada era parte de una parodia.

“Pensé: ‘No hay manera de que Will lo golpee’”, dijo Pinkett Smith. “No fue hasta que Will empezó a caminar de regreso a su asiento que me di cuenta de que no era una parodia”.

Smith se ha disculpado varias veces por el incidente, que le valió una prohibición de 10 años para asistir a los Oscar o cualquier otro evento de la academia.