El gobierno de Nuevo León emitió una segunda declaratoria de emergencia por sequía, ante la ausencia de lluvias, lo cual ha propiciado un drástico descenso en los niveles de las principales presas que abastecen agua a la zona metropolitana de Monterrey.
En febrero del año pasado la administración estatal activó la primera declaratoria por el bajo nivel de almacenamiento de las presas; actualmente 14 municipios enfrentan sequía extrema, informó.
La segunda, argumentó, se decidió debido a que los embalses no cuentan con el volumen mínimo requerido para soportar los siguientes meses, a pesar de las lluvias de jueves y viernes pasados generadas por el frente frío número 4.
La emergencia salió publicada en el Periódico Oficial del Estado del 6 de septiembre anterior, y detalla que la presa Cerro Prieto cuenta con una capacidad de almacenamiento del 7.7 por ciento; La Boca, con 11.9 por ciento, y la presa El Cuchillo con 41.9, lo que significa que Nuevo León se encuentra en los peores niveles, al calificar una cuarta etapa con sequía excepcional.
Ordena acciones para mitigar escasez de agua
“Se suspenden todas las actividades que por su naturaleza ameriten el uso excesivo de agua. Se deberán realizar todas las acciones de carácter preventivo que eviten la operación de infraestructura hidráulica, para ayudar a mitigar los efectos de la falta de agua", refiere el ordenamiento.
Destaca que ante el panorama que enfrenta la entidad es urgente que los sectores público, social y privado realicen acciones en conjunto para mitigar los efectos de la falta de agua potable
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Entre las medidas para conservar agua en los espacios interiores pide: evitar descargas innecesarias del inodoro y no arrojar el papel en estos, ni insectos, pañuelos o residuos similares, además de tomar duchas breves, entre otras.
También considera la suspensión de actividades públicas que ameriten uso excesivo de agua como el riego de pasto en espacios públicos con fines estéticos, así como en lugares recreativos.
Mientras en Tamaulipas, el titular de la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA), David Negrete Arroyos, anunció que con la lluvia del pasado jueves, la ciudad de Nuevo Laredo ha acumulado un total de 355 milímetros de precipitación pluvial en lo que va del año.
Explicó que en octubre se han registrado 25 milímetros de lluvia en la región. Esta cifra se suma a los 330 milímetros acumulados hasta septiembre pasado.
Este aumento en las precipitaciones pluviales, destacó Negrete Arroyos, es una noticia alentadora para la región, pues contribuye a aliviar los problemas de sequía y a fortalecer la disponibilidad de agua en esta ciudad fronteriza.
La CILA, agregó, continuará monitoreando las condiciones meteorológicas y proporcionará actualizaciones regulares sobre la cantidad de lluvia en la zona.