Ciudad Juárez, Chih. Decenas de migrantes, entre ellos niños, invadieron las vías del tren en la ciudad de Chihuahua para obligar al maquinista a parar y poder subir con rumbo a Ciudad Juárez.

Cada 24 horas, cientos de extranjeros, en su mayoría venezolanos, arriban a la capital del estado, situación que ha rebasado a las corporaciones policiacas de los tres niveles de gobierno, que sólo vigilan el río Bravo y no interfieren con el cruce de estas personas hacia Estados Unidos.

César Omar Muñoz, titular de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM), explicó que los operativos que lleva a cabo la corporación son 100 por ciento preventivos. No vamos a detener migrantes, vamos a apoyar a personal de migración porque ellos nos lo solicitan.

Un maquinista de Ferrocarriles de México (Ferromex) informó a sus superiores y autoridades de seguridad que los indocumentados caminan por las vías y se atraviesan para obligarlos a detenerse y poder abordar el tren. Por ello, al pasar por la ciudad de Chihuahua circulan a baja velocidad para evitar accidentes, ya que son muchas familias que están en movilidad con niños y adultos.

El objetivo de los extranjeros es llegar a Estados Unidos cruzando por Ciudad Juárez, ya que en cuanto arriban buscan agua y alimentos. Luego caminan hasta la puerta 38, por donde los reciben para solicitar asilo, el cual les es negado de inmediato y comienza el proceso de deportación a sus países de origen, de acuerdo con información de autoridades migratorias estadunidenses.

Operativos en río Bravo

El titular de la SSPM explicó que en días recientes han realizado operativos en la orilla del río Bravo, que se llena de migrantes, quienes al ver las unidades policiacas y del Instituto Nacional de Migración (INM) cruzan a Estados Unidos.

Comentó que en el primer operativo nos vieron llegar los migrantes y salieron corriendo, a pesar de que saben que no los podemos detener. Nuestra presencia sólo es por prevención.

El INM con apoyo de corporaciones federales y municipales, está bajando del tren en otros municipios a cientos de indocumentados para disuadirlos de que lleguen a Juárez, pero ellos siguen su camino.