En su segundo partido como entrenador en jefe, Julio Nava encaminó a Pumas CU a otra victoria en la Liga Mayor de la Onefa.
El cambio de coach le ha venido como anillo al dedo a los universitarios, que ayer impusieron condiciones y fueron muy superiores a los Borregos de la Ciudad de México, con paliza de 29-14 en el estadio Olímpico.
Los locales salieron al campo con una actitud distinta. Iniciaron el partido a tambor batiente y con los equipos especiales concretando la primera jugada grande.
En un regreso de patada, Rodrigo Blanco, quien recibió el ovoide en la yarda 10, explotó su talento con base en su fortaleza de piernas y su habilidad para quitarse rivales. Así fue como elemento auriazul corrió 90 yardas hasta celebrar un touchdown que sirvió de calentar motores.
Los dirigidos por Julio Nava no se quedaron quietos, y en su primera serie a la ofensiva encontraron el camino para volver a vulnerar a sus oponentes.
El juego terrestre fue la vía para debilitar a los Borregos. De esta manera, Esteban Espinosa encontró el hueco para llegar a la zona de anotación.
El mismo Espinosa Flores volvió a llegar hasta las diagonales producto de una intercepción que la defensiva recuperó instantes previos. Esta vez el versátil jugador se combinó por la vía aérea con el mariscal de campo Eduardo Rivera.
Andrea Martínez, después de acertar el primer punto extra, falló sus siguientes dos intentos, y se le vio cabizbaja pese a que su equipo se encontraba arriba en la pizarra (19-0).
Al regreso de la segunda mitad, Iker Colín fue interceptado por segunda ocasión, y su error volvió a costar puntos, aunque esta vez sólo fueron tres producto del gol de campo que consiguió Brandon Cervantes.
Pumas hizo todavía más abultado el marcador en una jugada en la que el quarterback de los felinos se abrió paso entre los defensivos para anotar por tierra.
Después de 29 puntos sin reacción, los Borregos tuvieron respuesta en el último cuarto con dos pases de Iker Colín.