Abogados de las familias de cinco civiles ejecutados extrajudicialmente por elementos del Grupo de Operaciones Especiales de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), en Nuevo Laredo, Tamaulipas, en mayo pasado, denunciaron que a pesar de que existen pruebas fehacientes que involucran a los 16 efectivos, la Fiscalía General de la República (FGR) sólo ejerció acción penal contra siete de ellos; además uno de los imputados está en libertad.
Afirmaron que el video, prueba principal del homicidio de los cinco civiles, así como la confesión de un soldado, demuestra la participación de 16 integrantes de la Sedena.
Las personas ultimadas son José Ángel Moreno Pool, Edgar Chavarría Rico, Jorge Antonio Colector Pineda, José Isabel Rivera Vega y Clinton Alex Blucha Pérez.
La FGR sólo imputó a siete soldados de los 16 que participaron en la agresión armada, la cual quedó grabada por cámaras de vigilancia de un centro comercial, y son el teniente de infantería José Luis N, y sus subalternos Armando N, Benito N, Ángel N, Filiberto N, Carlos N y Julián N
Todos inculpados por homicidio calificado y ejercicio ilícito del servicio público, de acuerdo con la carpeta judicial 203/2023. Además, uno de ellos se encuentra en libertad, pese al riesgo de que se de a la fuga, señalaron los litigantes. El resto está en la prisión del Campo militar número uno en la Ciudad de México.
Ayer, al reiniciar la audiencia, los abogados solicitaron que se ejercite acción penal en contra de los nueve uniformados que siguen en libertad, a pesar de las evidencias de su participación, y se les impute por delitos contra la administración de la justicia, encubrimiento y homicidio en grado de coparticipación criminal, entre otros.
Señalaron que la FGR “se ha convertido en cómplice deliberada” de quienes mataron a sangre fría a los cinco civiles, que ya habían sido detenidos, desarmados y estaban esposados, al no ejercer la acción penal contra todos los involucrados.
El 18 de mayo anterior, cinco personas armadas que iban a bordo de una camioneta pick-up blindada, fueron perseguidas por los militares; pero en la huida chocaron contra la barda perimetral de un centro comercial, donde fueron sometidos por los soldados, quienes les dispararon.