El Comité del 68 criticó lo mencionado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, en su conferencia de prensa matutina, sobre la participación del Ejército en 2 de octubre de 1968 y asevera que seguirá “enfrentando los intentos negacionistas y de reivindicación de los crímenes perpetrados por el Ejército”.
También continuará “gritando en las calles con la plena conciencia de que ¡fue el Estado! ¡fue el Ejército!, y “levantando la voz en nombre de las y los compañeros que han luchado por las libertades democráticas y por transformar profundamente este país”.
Refiere que al sostener que el principal responsable fue el entonces presidente Gustavo Díaz Ordaz, y que el Ejército solo ejecutó órdenes, se está “desconociendo amplios e históricos debates sobre la “obediencia debida, la cadena de mando, la objeción de conciencia y los diversos precedentes latinoamericanos”, y también “los avances jurídicos de los casos nacionales con respecto a los crímenes de lesa humanidad”.
En un comunicado, precisa que el Ejército “mantiene encuartelados los archivos del 68” y los relacionados con la “desaparición forzada de los 43 estudiantes de la escuela normal rural de Ayotzinapa y sostiene que esos archivos “no solo deben ser transparentados, sino judicializados”.
Asimismo, demanda “juicio y castigo a los genocidas”, pues “los delitos de lesa humanidad no prescriben, aunque los responsables mueran bajo el cobijo de la impunidad” y añade que sus integrantes sostienen la “exigencia de pleno acceso a las justicia” no solo en lo relacionado al 2 de octubre de 1968, sino también del 10 de junio de 1971, el periodo de contrainsurgencia denominado guerra sucia y la política de exterminio contra un grupo nacional que constituye un genocidio, reconocido así por el Poder Judicial de la Federación en 2007”.