Port Harcourt, Nigeria. Al menos 18 personas, entre ellas una mujer embarazada, murieron por una explosión en una refinería ilegal de petróleo en el sureste de Nigeria, informó este martes un responsable de seguridad en un comunicado.
"El incendio se declaró a una hora muy tardía, y 18 víctimas se quemaron hasta el punto de quedar irreconocibles, en tanto 25 personas heridas fueron auxiliadas", declaró el portavoz del Cuerpo Nigeriano de Defensa y de Seguridad Civil (NSCDC) del estado de Rivers, Olufemi Ayodele.
La explosión ocurrió el domingo al terminar la jornada en el Estado de Rivers, región del delta de Niger devastada por décadas de vandalismo y explotación ilegal de hidrocarburos.
"La mayoría de las víctimas eran jóvenes, entre ellos una mujer embarazada y una joven que se preparaba para la ceremonia de su matrimonio el mes próximo", agregó.
Según habitantes del distrito, contactados por AFP, el balance podría ser mayor pues decenas de personas se encontraban en el lugar cuando ocurrió la explosión.
Los grupos armados y habitantes extraen con frecuencia el crudo de los oleoductos de las grandes compañías petroleras, que luego refinan en sitios ilegales y revenden en el mercado negro.
La peor explosión de oleoducto en Nigeria ocurrió en octubre de 1998 en la localidad de Jesse (sur), causando más de 1.000 muertos entre los habitantes.
En 2022, más de 110 personas murieron en la explosión de una refinería en la misma región.
Pese a la gran riqueza en hidrocarburos del país, la mayoría de los habitantes viven en la gran pobreza y acusan a las grandes compañías petroleras de contribuir a la contaminación de su región sin colaborar en su desarrollo.