Oaxaca, Oax. Dos de cinco indígenas mazatecos que están en prisión preventiva desde hace nueve años en varios penales de Oaxaca, como presuntos responsables del homicidio de Gustavo Estrada y Manuel Zepeda Lagunas (este último hermano de la titular de la Secretaría de las Mujeres estatal, Eliza Zepeda), cometido en diciembre de 2014, tras un enfrentamiento entre pobladores en el municipio de Eloxochitlán de Flores Magón, podrán enfrentar su proceso en libertad luego de que un juez modificó la medida cautelar la noche del jueves anterior.
Los beneficiados por dicha determinación son el profesor Jaime Betanzos Fuentes y Herminio Monfil, y quedaron pendientes los casos de Alfredo Bolaños, Fernando Gavito y Francisco Durán, informó el viernes Argelia Betanzos, hija de Jaime.
El 14 de diciembre de 2014 la asamblea comunitaria de dicha demarcación, que se rige por el sistema normativo interno, organizó una reunión para elegir alcalde. Cuando estaba por iniciar el acto un grupo de sujetos armados irrumpió con machetes y tubos, encabezados por Manuel Zepeda Lagunas, hijo del ex presidente municipal Manuel Zepeda Cortés (2011-2013).
El entonces edil Alfredo Bolaños Pacheco (2013-2015) había denunciado el desvío de 21 millones de pesos en la administración de su antecesor, por lo que los seguidores de este último estaban inconformes e incluso tenían tomado el palacio municipal.
En la trifulca, los policías comunitarios detuvieron a Zepeda Lagunas, quien resultó golpeado; pero de acuerdo con testigos se encontraba en buenas condiciones, por lo que decidieron trasladarlo a Huautla de Jiménez para ponerlo a disposición de las autoridades.
Al llegar a dicha demarcación separaron a los comunitarios del detenido, los esposaron y los llevaron a la ciudad de Oaxaca con el pretexto de que debían ampliar su declaración. En la capital del estado los arrestaron por homicidio calificado, pues les aseguraron que el hombre que habían entregado había fallecido.
Podrán llevar sus procesos en libertad
A partir de ese momento se giraron 35 órdenes de aprehensión, a la fecha sólo quedaban cinco personas en las cárceles de Tenivet, en el reclusorio de San Juan Bautista Cuicatlán y en la prisión de Etla.
Ayer, Argelia Betanzos explicó que la noche del 28 de septiembre, el juez de la causa tomó en cuenta las determinaciones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos sobre la prisión preventiva que considera esa medida como violatoria de los derechos humanos y determinó modificar la medida cautelar a fin de permitir que dos de los cinco detenidos puedan llevar su proceso en libertad.
La madrugada del viernes Herminio Monfil fue puesto en libertad y por la tarde Jaime Betanzos Fuentes salió del penal De la Villa de Etla.
La defensora de derechos humanos expresó que la liberación de los dos mazatecos es un gran logro
para las 40 familias de Eloxochi-tlán de Flores Magón, que habían sido afectadas por este conflicto.
Los delitos que se les imputaron, además de los asesinatos, son un incendio y daños provocados a una propiedad privada, así como los supuestos intentos de feminicidio contra Elisa Zepeda y su madre; varias acusaciones ya han sido de-sechadas en los tribunales, detalló Argelia Betanzos, quien ha denunciado la fabricación de delitos contra los detenidos.
La activista dijo que el amparo del poder
, Elisa Zepeda, primero arropada por Morena, partido por el que fue diputada local, ha montado una persecución política contra quienes hicieron frente al cacicazgo de su familia y que hoy son presos políticos.
Betanzos insistió que en repetidas ocasiones se ha probado la inocencia de los acusados; aunque el Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE) se ha mostrado siempre en favor de la familia Zepeda y no de la verdad
, por lo que demandó un trato igualitario a las partes y que se busque la verdad.
Recordó que al menos tres de los ocho detenidos han alcanzado su libertad a través de amparos, como Miguel Peralta, quien obtuvo una sentencia absolutoria.
Pero tres años después el TSJE la revocó de forma arbitraria, por lo que actualmente se encuentra en calidad de desplazado y perseguido político.
Al respecto de la liberación, la funcionaria estatal Elisa Zepeda, en un comunicado, en el que omitió la presunción de inocencia, insistió en señalar como asesinos de su hermano y de intentar matarla a ella y a su madre a Jaime Betanzos y a Herminio Monfil.