Culiacán, Sin. La Sociedad Sinaloense de Especialistas en Medicina de Emergencias (SSIME), exigió justicia por el homicidio del médico, Otniel Everardo Montoya, quien pereció en el enfrentamiento que se registró en una clínica particular en Culiacán, donde murieron otras dos personas.
Autoridades de la Secretaría de Seguridad Pública estatales informaron que fueron tres las personas que fallecieron en el interior de la clínica particular, un médico y otros dos civiles.
La tarde noche del jueves, sujetos armados ingresaron a la clínica Culiacán, ubicada en el centro de la capital, donde habían internado a dos pacientes que resultaron heridos por proyectiles de armas de fuego, en la sierra de Badiraguato, los agresores dispararon contra las personas que se encontraban en el sitio, entre ellos el doctor.
La SSIME exigió justicia a las autoridades y demandó condiciones de seguridad a la comunidad de la salud en hospitales públicos y privados, y lamentó la pérdida de su colega y amigo.
Otniel Montoya, en 2020 había terminado su residencia, laboraba durante la semana en la clínica privada en Culiacán y se desempeñaba como médico urgenciólogo, los fines de semana en la clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social, en el municipio de Guamúchil, el doctor era originario del ayuntamiento de Angostura.
Según el reporte el galeno falleció en un área de quirófano, debido a que había sido trasladado un paciente y justo en el momento irrumpieron en el lugar un grupo de hombres armados que dispararon en repetidas ocasiones, contra los que se encontraban en el lugar, entre ellos Otniel Montoya.
El secretario de Salud de Sinaloa, Cuitláhuac González Galindo, lamentó los hechos, tras considerar que era un doctor joven que iba empezando a ejercer la medicina, por lo que realizó un llamado a las autoridades de Seguridad Pública para que fortalezcan la seguridad en las instituciones de salud, pues todos los lugares donde se ofrecen servicios de salud deben notificar cuando ingresan pacientes con características de alto riesgo para evitar poner en peligro a la población en general.