Ciudad de México. Tras la realización del Diálogo Nacional por la Paz, efectuado entre el jueves y el sábado pasados, convocado por los obispos de México, se elaboró una Agenda Nacional de Paz y se estableció una red nacional, para exigir verdad y justicia, informó el editorial del semanario católico Desde la fe.
Indicó que el diálogo seguirá, “es nuestra estrategia y no vamos a parar; nos sentimos llamados a construir sin tregua la paz. Pronto seremos convocados como individuos, como familias, como parroquias, a dialogar, a comprometernos a una vida sin violencia a pensar y construir la paz”.
Agregó que la violencia en México continúa, “los jóvenes son atrapados por las sombras violentas que envuelven nuestra realidad nacional. La desaparición de Roberto, Uriel, Diego, Dante y Jaime en Lagos de Moreno, Jalisco, y la exhibición macabra de cómo eran obligados a agredirse entre ellos, nos cimbró a todos”.
Mencionó que “fuimos testigos a través de las redes sociales, de cómo un grupo de jóvenes universitarios, sin inhibiciones agredían a otro joven. Aunque son violencias diferentes, al final, son expresiones de las sombras en que estamos inmersos y que nos arrebatan la paz”.
Destacó que “la expresión, quizás mas grave de nuestra crisis, es que estas y otras escenas violentas, parecerían sólo capaces de conmovernos por pocos días y resultar ya incapaces de movilizarnos para actuar y exigir justicia. Así se va instalando en el cotidiano de nuestras vidas la indiferencia social, uno de los mayores obstáculos para la paz”.
Mencionó que el diálogo “no fue un punto de llegada, sino un momento en el camino, un camino en que vamos juntos, convocados en su inicio por la muerte violenta de los jesuitas Javier y Joaquín, y de Pedro Palma, padre y esposo amoroso”. Agregó que el diálogo nacional convocó voces diversas; "la pluralidad de los asistentes constituyó un mosaico en que reconocimos la riqueza de nuestra diversidad".