Nueva York. El magnate de los medios de comunicación Rupert Murdoch, de 92 años, dejará la presidencia de Fox Corporation, empresa matriz del canal favorito de los conservadores estadounidenses Fox News, y de News Corp, y pasará el puesto a su hijo Lachlan, anunciaron ambas empresas en un comunicado el jueves.
Esta retirada se hará efectiva en la próxima junta general de accionistas de las dos firmas a mediados de noviembre. Rupert Murdoch se convertirá entonces en presidente "emérito".
El veterano empresario deja un legado controvertido, acusado de haber favorecido, a través de sus periódicos y sus canales de televisión, el ascenso del populismo en los países anglosajones, simbolizado por el Brexit en Reino Unido y el ascenso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos en 2016.
En un memorando a sus "colegas" de Fox, Murdoch asegura que "la batalla por la libertad de expresión y, en última instancia, la libertad de pensamiento, nunca ha sido más intensa".
En su estilo habitual, el patriarca critica a "las burocracias", "las élites (que) desprecian abiertamente a quienes no forman parte de su clase desconectada" de la gente, así como a "la mayoría de los medios de comunicación confabulados con estas élites, que venden narrativas políticas en lugar de buscar la verdad".
"En nombre de las juntas directivas de FOX y News Corp, los equipos directivos y todos los accionistas que se han beneficiado de su arduo trabajo, felicito a mi padre por su notable carrera de 70 años", dijo Lachlan Murdoch, de 52 años, en el comunicado de ambas empresas, en el que reconoció su "espíritu pionero, su determinación inquebrantable", su "legado duradero" y agregó que cuenta con sus "valiosos consejos".
Un imperio achicado
Ya presidente de Fox Corporation, Lachlan Murdoch se posicionaba como el favorito para suceder a su padre, entre su hermano James, considerado más liberal, y sus hermanas Prudence y Elisabeth, en una disputa familiar que inspiró la exitosa serie televisiva "Succession".
La designación de Lachlan no elimina las dudas sobre la dirección que tomará el imperio cuando Rupert Murdoch fallezca, porque sus cuatro hijos tendrán entonces los mismos derechos de voto dentro del grupo.
Lachlan tomará las riendas de un imperio achicado, tras la compra por parte de Disney en 2017 del grupo de entretenimiento 21st Century Fox y su amplio catálogo de películas, a un valor de 66.000 millones de dólares. Entonces, Fox Corporation se volvió a centrar en los deportes y la información.
El jefe del imperio Fox, cuyo canal de noticias de 24 horas Fox News es fundamental para los conservadores, se retira en un momento clave, cuando se acercan las elecciones presidenciales estadounidenses de 2024, en las que Trump es el favorito de las primarias republicanas.
Hace cinco meses, Fox News tuvo que pagar la suma de 787,5 millones de dólares al fabricante de máquinas de voto electrónico Dominion Voting Systems para evitar una demanda por difamación después de las elecciones presidenciales de 2020.
En el proceso, uno de sus presentadores estrella, Tucker Carlson, abandonó el canal, que desde entonces ha perdido audiencia.
Hasta el momento Lachlan Murdoch no ha dado señal alguna de pretender atenuar la línea conservadora de Fox News.
Tabloide
El jefe de periódicos más poderoso y conocido del mundo, que comenzó con un simple diario en Adelaida, su Australia natal, a principios de la década de 1950, construyó un imperio internacional. Sus diarios y canales de televisión tuvieron una influencia considerable en Reino Unido y Estados Unidos.
Fox News, creada en 1996 para competir con CNN, fue percibida jugando un papel central en el ascenso político de Trump, aunque los medios del grupo Murdoch (New York Post, The Wall Street Journal) no siempre han perdonado al multimillonario republicano.
Al reinventar el estilo "tabloide", mezclando noticias sensacionalistas, escándalos, deportes y sexo, Murdoch gozó del éxito pero también tuvo que enfrentar una serie de polémicas.
Por ejemplo, los métodos utilizados por el periódico británico sensacionalista News of the World provocaron un sonado escándalo en 2011. Los empleados piratearon los teléfonos de decenas de personas, incluidos miembros de la familia real, para recopilar en secreto información jugosa, desafiando a la ley. Debido a este escándalo y tras 168 años de existencia, el semanario cerró sus puertas.