La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) expresó su solidaridad con quienes perdieron familiares y todavía enfrentan las secuelas de los sismos ocurridos el 19 de septiembre, en 1985 y 2017.
Rogelio Cabrera López, arzobispo de Monterrey presidente de la CEMy Ramón Castro Castro, obispo de Cuernavaca y secretario general del organismo episcopal expresaron su respaldo a quienes han sufrido los efectos de desastres naturales.
“Hoy, 19 de septiembre, recordamos con profunda tristeza y solidaridad los trágicos sismos que han marcado la historia de nuestro amado país en este día. México fue sacudido por la fuerza de la naturaleza, cobrando vidas, dejando a miles de personas damnificadas y despojando a familias de sus hogares y patrimonios.
“En estos momentos de recuerdo y reflexión, en la Conferencia del Episcopado Mexicano nos unimos en oración para pedir consuelo y fortaleza para todos aquellos que han sufrido a causa de cualquier desastre natural, como los mencionados terremotos, los huracanes, incendios y demás. Estos desastres han dejado su huella de destrucción y dolor, pero también de solidaridad y fraternidad. Nuestros corazones están con aquellos que perdieron a seres queridos y con quienes todavía enfrentan las secuelas de estos desastres”.
Confiaron en que tengan “consuelo y fortaleza a todos los afectados, y que les brinde la esperanza necesaria para reconstruir sus vidas.
“Como Iglesia, recordamos el poder de la oración y la importancia de mantenernos unidos en momentos de adversidad. Encomendamos a cada uno de ustedes a la protección y guía divina, y los alentamos a que eleven sus corazones en oración y plegaria a Dios y a la Virgen de Guadalupe, nuestra madre amorosa y patrona de México”.
Confiaron en que La Guadalupana y Dios guíe “por el camino de la esperanza y la reconstrucción”.