Matamoros, Tamps. Elementos de la Policía Ministerial con amenazas y violencia disolvieron la madrugada de este martes, el bloqueo que mantenían familiares y amigos de Leslie Alejandra, de 21 años de edad, asesinada hace cuatro meses, por su pareja sentimental. El desalojo ocurrió en el Puente Internacional Ignacio Zaragoza que comunica a Matamoros con Brownsville.

Con equipo táctico de chalecos antibalas, cascos y armas largas, los ministeriales llegaron para acusar verbalmente a Mayra Torres, madre de la joven Leslie Alejandra, quien murió a golpes en mayo pasado, de obstruir una vía federal de comunicación al bloquear el acceso al cruce internacional.

Dentro de sus acciones los policías que además llevaban capuchas, decomisaron dos camionetas que la familia usó para cerrar el paso en el puente a desnivel.

“Se llevaron nuestras camionetas, nos dijeron que si seguíamos aquí nos iban a meter a la cárcel con todo y acompañantes, por eso nos vamos, adentro no le servimos a Leslie, necesitamos estar afuera para que encarcelen a su asesino Jesús Baltazar”.

Durante 17 horas, padres de Leslie y colectivos feministas mantuvieron el bloqueo en el cruce, dejando pérdidas por 10 millones de pesos de acuerdo a la Cámara Nacional de Autotransporte de Carga.

La protesta inició a las 7:00 horas del lunes, y se desarrolló de manera pacífica e impidió el flujo de conductores y mercancías por este cruce dedicado a la exportación e importación de diversos productos.

La mujer de 21 años, se encontraba embarazada cuando fue asesinada a golpes por su pareja, la joven hacía prácticas profesionales de enfermería, y concluyó sus estudios en la Facultad de enfermería de la Universidad Autónoma de Tamaulipas.

Mayra Torres, mamá de la joven, acusó a la Fiscalía de Justicia del estado de proteger a Jesús Baltazar N., ex pareja sentimental de Leslie Alejandra, quiene desapareció el pasado 11 de mayo, y su cuerpo fue hallado con huellas de violencia ocho días después.

Conductores desesperados enfrentaron a los manifestantes mientras autoridades hacen presencia en el lugar con la intención de desalojarlos.