Tlalmanalco, Méx. A tres meses del asesinato del ambientalista Álvaro Arvizu integrante del colectivo Centro para la Sustentabilidad de la Sierra Nevada Incalli Ixcahuicopa (Centli), uno de los presuntos responsables fue detenido y vinculado a proceso por homicidio.

La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) informó que Kemish Alan “N” forma parte de una banda delictiva y habría participado en otro homicidio perpetrado 24 horas antes, en Chalco.

La hipótesis de la FGJEM establece que el detenido forma parte de una banda dedicada al robo de herramientas y una vez que se enteraban que había una carpeta de investigación, regresaban para ultimar a los testigos denunciantes.

Álvaro Arvizu falleció el pasado 13 de junio en un hospital de Chalco. Seis días antes fue atacado dentro de las instalaciones del Centli, organismo ambiental financiado por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Los partes policiacos de aquella fecha indicaban que el hombre fue herido de gravedad con un machete y los responsables sustrajeron dinero y objetos del inmueble ubicado en la comunidad de San Rafael.

La FGJEM determinó que Kemish ya en otras ocasiones había intentado ingresar al edificio de la UAM donde intentó sustraer herramienta, sin éxito. En junio regresó y fue descubierto por la víctima.

Kemish Alan “N” fue detenido junto con Jesús Israel “N”. A los dos se les señala de haber participado en otro robo llevado a cabo en abril pasado en la comunidad de Mira Flores en Chalco.

El propietario denunció y fue citado para reconocer a los sospechosos; pero fue asesinado el 12 de junio y ya no pudo ampliar su declaración.

“Derivado de los hechos antes referidos se pudo establecer que dicha agresión fue con el objeto de evitar que la víctima reconociera a los presuntos asaltantes del robo a casa habitación ocurrido”.

La FGJEM, asegura que los hoy procesados estarían relacionados con otros atracos.

“Los datos de investigación también identificaron antecedentes de robos en la misma región y con modus operandi similar; lo que hace presumir que, uno de los principales móviles en la comisión de este tipo de ilícitos, era asesinar a sus víctimas para evitar fueran denunciados e identificados ante las autoridades”.

Ambos imputados se encuentran recluidos en el penal estatal de Chalco, aunque en el caso de Kemish, se le vinculó por ambos homicidios.

Luego del homicidio del ambientalista, organismos defensores de los derechos humanos condenaron los hechos y el pasado 23 de agosto, el Congreso mexiquense emitió un exhorto al titular de la FGJEM a fin de esclarecer los hechos.