Nashville. Raspones en la piel que sacan hasta sangre. Baños de agua fría para mitigar el dolor. Hombros, espaldas, caderas, rodillas y tobillos aporreados.
Añada lesiones que ponen fin a una temporada, como la del estelar quarterback Aaron Rodgers al romperse el tendón de Aquiles izquierdo el lunes en su debut con los Jets de Nueva York y el desgarro del ligamento cruzado anterior sufrido por Von Miller, que el integrante de la defensiva de los Bills de Buffalo atribuyó a jugar en una superficie artificial.
Los jugadores prefieren disputar sus partidos en césped natural. Y es por ello que la Asociación de Jugadores de la NFL clamó el miércoles para que la liga de fútbol americano ordene que todos sus campos sean de césped natural, al describir esa medida como “la decisión más fácil" que puede tomarse.
El director ejecutivo del gremio, Lloyd Howell, manifestó que los jugadores “abrumadoramente” prefieren el pasto natural y que “la evidencia es clara” de que éste es más seguro que cualquier tipo de superficie sintética.
“Es un problema que ha estado arriba en la lista de prioridades de los jugadores durante mis visitas a los equipos y es algo que yo he planteado a la NFL”, añadió en un comunicado.
El pedido del sindicato de jugadores salió a la luz pública menos de 48 horas después de que Rodgers, cuatro veces Jugador Más Valioso de la NFL, sufrió una lesión que prematuramente puso fin su temporada.
“Duele que tenga que ser así”, dijo el linebacker de Carolina Shaq Thompson. “Ojalá que tengamos una reacción generalizada y se tomen medidas”.
Thompson ha criticado al dueño de Carolina David Tepper por reemplazar el césped natural con una superficie artificial para el estadio de los Panthers en 2021, en parte para montar los partidos del nuevo equipo de Charlotte en la MLS — la liga estadounidense de fútbol.
Cuando la Copa Mundial de fútbol de 2026 se dispute en Norteamérica, los 11 escenarios de Estados Unidos serán estadios de la NFL.
El comisionado de la NFL, Roger Goodell, dijo el miércoles en el programa “First Take” de ESPN, que la superficie de los campos de juego es un “tema complejo” y que parte del contrato colectivo laboral cubre el uso de la ciencia para medir las lesiones. La liga y el sindicato de jugadores utilizan la misma información para llevar esa estadística.
Goodell destacó que la lesión de Rodgers fue una de las dos en el tendón de Aquiles en la primera semana de la temporada, siendo la otra en pasto natural.
“Ahí es donde tomamos decisiones, basados en la ciencia, no porque veo una lesión que no me gusta”, dijo Goodell.
“En última instancia, quiero que nuestros expertos nos retroalimenten y es por eso que estamos comprometidos e involucrados en el proceso y por ello aceleramos con la NFLPA (la asociación) el poder obtener los datos para que podamos tomar este tipo de decisiones”.
Howell señaló que los jugadores entienden que el cambio implica una inversión de dinero. Pero advirtió que el costo será mayor para la NFL si la liga de fútbol americano sigue perdiendo a sus mejores jugadores por “lesiones innecesarias”.
Resaltó que la NFL cambia las superficies de los estadios para que se juegue en césped natural en partidos de fútbol.
“Pero las superficies artificiales se aceptan para nuestros propios jugadores”, dijo Howell. “Esto amerita la inversión y es algo que debe cambiar ahora mismo”.