Xalapa, Ver. Habitantes del municipio de Nanchital al sur de Veracruz se manifestaron frente al palacio municipal, que encabeza Esmeralda Mora Zamudio (Morena), en rechazo al proyecto de instalación de un Relleno Sanitario Regional, anunciado por el presidente de la república Andrés Manuel López Obrador.
De acuerdo con lo anunciado por el presidente de México, este relleno sanitario regional recibirá los desechos urbanos de Coatzacoalcos, Minatitlán, y Cosoleacaque, tras el cierre definitivo del basurero a cielo abierto de Las Matas. En su anuncio, el presidente estimó que el depósito de basura se realizará de forma adecuada, sin olores ni contaminación de mantos freáticos.
Con enormes lonas, cartulinas y volantes, los habitantes de Nanchital expresaron su inconformidad ante este proyecto: “No al relleno sanitario” y “Son unos traidores”, gritaron durante la protesta. Y lanzaron duros señalamientos a la presidenta municipal Mora Zamudio, quien no les informó de la instalación del relleno sanitario.
“Que cada municipio se haga cargo de su basura, si este sitio será solo para que nosotros depositemos nuestra basura estamos de acuerdo, de lo contrario no permitiremos que nos vengan a tirar la porquería de otros lados”, reclamó otro inconforme.
A pesar de que López Obrador, pidió que no se culpará a la presidenta municipal, Mora Zamudio, los pobladores le reclamaron la falta de información y que no los haya tomado en cuenta antes de aprobar la instalación del relleno sanitario.
Ante la protesta de este día, el palacio municipal fue cerrado al público y blindado con policías municipales.
Horas antes, la alcaldesa Esmeralda Mora declaró que desconocía detalles del proyecto hasta antes del anuncio del presidente, al no ser invitada a las reuniones de trabajo, aun cuando los trabajos se realizan desde hace varias semanas en su municipio.
“Teníamos todo el desconocimiento, no nos habían invitado a las reuniones, y pues ahorita con esta información que se tienen del señor presidente vemos que ya se están llevando a cabo”, declaró.
Aseguró que este proyecto no causará daños al medio ambiente, por lo que pidió la confianza y comprensión del pueblo.
Los habitantes inconformes afirmaron que seguirán con su lucha y no dejarán que se instale el relleno sanitario. Los manifestantes convocaron a una nueva protesta el próximo 14 de septiembre, y advirtieron que tramitarán amparos para que se frene este proyecto.